NBA | PLAYOFFS 2023 | CELTICS-HEAT (0-1)
Machada brutal: Butler conquista el Garden
Los Heat ganan el primer partido de las finales del Este con un Butler imperial. En Boston vuelven a pecar de indolencia. Hay serie.
Si alguien pensaba que la serie entre Celtics y Heat iba a ser corta, que se vaya preparando. Las cosas han empezado calentitas y no parece que vayan a cambiar a corto plazo: victoria del equipo de Erik Spoelstra a las primeras de cambio para conquistar Boston y ganar la ventaja de campo. Así, sin más: con, de nuevo, un Jimmy Butler imperial y logrando un resultado (116-123) que no puede sorprender a nadie a pesar de ser una sorpresa. Al fin y al cabo, los verdes son unos expertos en negarse a ser todo lo sólidos que deberían y los de Florida unos especialistas en revoluciones, machadas, golpes sobre la mesa. Tienen las cosas muy claras, juegan muy bien, están magníficamente entrenados y no tienen nada que perder. Son el mismo equipo, en plantilla y estructura, que llegaron a esta misma ronda el curso pasado. Por mucho que entonces lo hicieran como primeros clasificados y ahora como octavos. Parece que nada ha cambiado. Y, en realidad, no lo ha hecho: la serie de 2022 se fue a siete duros partidos. Y esta empieza tan fuerte que ya promete ser larga. Veremos.
Los Heat cimentaron su victoria en un extraordinario tercer cuarto en el que anotaron 46 puntos, una cifra ignominiosa para unos Celtics paupérrimos, que desaparecieron del mapa desde el punto de vista defensivo. No es la primera vez que les pasa: sus desconexiones constantes son demasiado grandes como para poder considerarles 100% favoritos a pesar de que lo son, más ahora que quedan cuatro equipos en liza y Bucks o Warriors (también Sixers, para el que quiera contarlos) están eliminados. Pero tienen que corregir cuanto antes sus ausencias, su incapacidad manifiesta para cerrar series o para perder partidos inexplicables, si no quieren que se les vuelva a escapar el sueño del anillo... o tener incluso un susto antes de tiempo, contra los Heat. Solo perdieron un cuarto en todo el partido y fue ese, el tercero, en el que permitieron a sus rivales lanzar por encima del 65% en tiros de campo y del 66% en triples. Al final de ese periodo, el resultado era de 103-91. Le habían dado la vuelta al 57-66 del descanso sin excesivos problemas. Y no hay nadie mejor que Spoelstra para mantener ventajas. Y así fue, claro.
Los Celtics, que llegaron a ganar de 13 tantos y a conseguir un parcial de 18-5 en el segundo periodo, lo intentaron sin suerte. Se pusieron a 5 (103-108) a menos de 8 minutos para la conclusión. Volvieron a hacerlo (109-114) a menos de 5. A 2:31, Marcus Brogdon anotó uno de sus dos intentos desde la personal (110-114). Hasta ahí llegaron los Celtics: n triple de Caleb Martin y otro de Jimmy Butler acabaron con las opciones de los azules y permitieron a los Heat calcar los resultados ya conseguidos en las rondas anteriores, cuando también ganaron el duelo inicial a Bucks primeros, y a Knicks después. De nada sirvieron los 30 puntos y 7 rebotes de Jayson Tatum, ni los 22+9, con 5 asistencias, de Jaylen Brown. Brogdon se fue a 19 desde el banquillo. Derrick White, a 11. Marcus Smart sumó 13 tantos y 11 pases a canasta. Y Robert Williams un 14+7 con 6 de 6 en tiros de campo, pero un -14 con él en pista, siempre superado por Bam Adebayo. Eso hizo que Joe Mazzulla le relegara al banquillo (disputó menos de 26 minutos), poniendo a Horford sobre el pívot y buscando quintetos más pequeños. Tampoco funcionó.
Ojo con los Heat. Pueden dar problemas a cualquiera, están imbatidos en su pista en playoffs (5-0), y llenos de una merecida confianza tras ser octavos del Este y llegar a las finales de Conferencia. Y Jimmy Butler sigue imperial: 35 puntos, 5 rebotes, 7 asistencias y 6 robos con un 12 de 25 en tiros de campo, 2 de 4 en triples, 9 de 10 en tiros libres. Martin, Kyle Lowry, Gabe Vincent y Marc Strus sumaron 15 tantos por cabeza, Adebayo se fue a 20+8+5 y Kevin Love un correcto 8+6 desde su titularidad, ya habitual. Y los Heat un 16 de 31 en triples, una cifra excelsa que compatibilizaron con las 15 pérdidas que provocaron en los Celtics. El equipo de Florida empieza ganando, lo hace con autoridad, conquista el Garden y promete una serie larga. Y lo peor para los verdes no es eso: es que siguen encadenando sus fallos habituales, no son capaces de rectificar y caen sostenidamente en la repetición de los defectos que les han impedido pasar de candidato constante y principal favorito a campeón. Y ahí está el tema: en ganar. No hay nada más.