El campeón ya está completo

El campeón está de nuevo ensamblado, completo. No, no están definitivamente todos: contra Los Angeles Clippers (una paliza marca de la casa: 126-94), Boston Celtcis no tuvo a Al Horford (ni a Luke Kornet). Pero sí volvió, por fin, la idea integral de Brad Stevens, el arquitecto del equipo que ha decodificado y superado el estilo actual de la NBA, que ha creado una forma tan perfecta de adaptarse a lo que funciona ahora en esta liga que cada derrota, un rastro de miguitas dispersas e intrascendentes, suena a sorpresa de las buenas. En un partido sin más historia que ver cómo el ritmo de juego, el flujo de pases y triples lanzados sin parar, de los Celtics destripaba a otro rival, el que fuera que estaba delante, volvió Kristaps Porzingis. Y la idea, de nuevo, está completa.

Porzingis no había debutado esta temporada y se ha adelantado unos días porque se le esperaba para algún momento de diciembre. Tampoco jugó casi en los playoffs, Finales incluidas, pero no hizo falta. Ahora, después de una extraña lesión en un pie y el consiguiente paso por el quirófano, está de vuelta y los Celtics pueden cubrir una de sus pocas imperfecciones, la protección del aro. Y hacerlo con un jugador que, además, abre la pista, lanza triples desde muy lejos y juega siempre que hace falta un pick and roll muy alto que ayuda a que las defensas rivales se queden sin piernas, sin efectivos, sin saber qué parte de la pista tienen que cubrir a toda velocidad en la siguiente fracción de segundo. En su regreso, el letón jugó 23 minutos con algo de óxido pero buenas sensaciones y acabó con 16 puntos, 6 rebotes, 2 asistencias y 2 tapones.

Los Clippers llegaban con una racha de cinco victorias que se va de Boston aplastada (notable 11-8 en todo caso). Los Celtics (15-3) se colocan con seis consecutivas y tienen ahora, un alivio para todos los demás, cuatro días de descanso antes de visitar a Bulls y, cuidado, Cavaliers. Ese partido, que se jugará el domingo, es uno de esos a los que toda la NBA prestará mucha atención: si estos Cavs (17-1), en su pista, no le ponen el cascabel al gato verde, ¿quién va a hacerlo? Mientras, otra victoria por sometimiento se resolvió en el segundo cuarto con más puntos de un equipo (51-29) dese 1990, un trance en el que los Celtics (esto es así, guste más o menos) embocaron los triples y se convirtieron en literalmente imparables. En todo el partido tiraron 51 veces de tres y 37 de dos. Otra vez, da igual que guste o no porque es lo que funciona. Entre los parciales primero, tercero y cuarto, firmaron un 10/34, por debajo del 30%, desde la línea de tres. En el segundo, un 12/17 (70%) que reventó el partido. Y ya está.

Esos doce triples igualaron el récord de la NBA en un cuarto. Los Celtics anotaron los seis primeros y abrieron una brecha que ya no se cerró. Dio igual que se pasaran después casi cinco minutos del tercer cuarto sin anotar (78-59) o que los Clippers remaran hasta un prometedor, tal y como se había puesto la cosa, 86-71. Los locales escaparon otra vez a base, sí, de triples. Con esa pareja del banquillo que tiene muchas noches así, determinantes: 6/10 y 20 puntos de Payton Pritchard, 3/3 y 9 de Sam Hauser. Además, Neemias Queta jugó un muy buen partido por dentro (12 puntos, 9 rebotes, 4 tapones) para completar el trabajo de una segunda unidad sin, recordemos, Horford. Porque sobran recursos. De los titulares, 20 puntos de Tatum, 17 de Brown, 19 con cinco triples y 7 asistencias de White… Lo que hizo falta, sin más, en otro día en la oficina.

Los Clippers, sin Norm Powell, se quedaron obviamente cortos en ataque y su defensa, asfixiante contra la mayoría de rivales, tampoco supo qué hacer cuando llegó la avalancha del segundo cuarto. No es algo para mortificarse: nadie sabe, ahora mismo. James Harden acabó con 19 puntos, 8 rebotes y 9 asistencias e Ivica Zubac con 23 puntos y 10 rebotes para un equipo que la temporada pasada solo perdió por más de treinta puntos contra un rival: estos mismos Celtics que ya parecían lo mejor de la liga (con permiso de los Cavaliers: es la jerarquía del campeón) y que acaban de recuperar a Porzingis. Por si hacía falta.

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