Rodríguez pone la guinda a un día perfecto
El uruguayo fulmina al Súper Agropal Palencia con 33 puntos (5 de 7 en triples). Tapa el mal día en el tiro de Granger junto a Schmidt (25) y Kravic (21).
Domingo especial para el Movistar Estudiantes. Hubo de todo. Y todo bueno. Primer, empezó con la tradicional Carrera de la Afición (octava edición ya) y, luego, siguió con la aún más tradicional foto de la cantera, que se trasladaba por primera vez desde el Magariños al Movistar Arena. Bonitos tentempiés antes de la gran batalla, el enfrentamiento contra el Súper Agropal Palencia.
RESUMEN
98 - Súper Agropal Palencia (22+36+18+22): Oroz (2), Borg (20), Hernández (3), Vaulet (17), Krutwig (10) -cinco titular-, Wintering (21), Kunkel (16), Rodríguez (5) y González (4).
Árbitros: De Lucas, Ibáñez y Seijo. Eliminado con cinco faltas Kunkel.
Pabellón: Movistar Arena (Madrid); 9.785 espectadores.
Un rival directo por el ascenso, que a pesar de la buena imagen que desprendió en el pabellón madrileño, claudicó en un encuentro extremadamente ofensivo (104-98). Intercambiar golpes con este Estu no es buen idea…
Los palentinos, con la baja importante de Kamba, hincaron la rodilla porque no pudieron frenar a Joaquín Rodríguez. Aunque puede que la frase poder frenar no sea la adecuada porque el uruguayo, en su cuarto partido como colegial, estuvo imparable. Nadie dudaba de su calidad, pero lo visto este domingo… no tiene calificativos. El jugador cedido por el Casademont Zaragoza se disparó a unos impresionantes 33 puntos con un 5 de 7 desde el triple. De sus seis lanzamientos de dos, solo falló uno… y fue en el último cuarto y forzado por una posible falta. Atrapó 4 rebotes, repartió 5 asistencias y forzó 6 faltas para ¡37 de valoración!
Su voracidad fue fundamental para clavar una estaca en el corazón palentino. Comandó junto al fabuloso Devin Schmidt (majestuosos 25 tantos con un 6 de 9 de tres) el parcial de 18-10 que cerró el duelo. Del problemático 86-88 al definitivo 104-98 en 6:13 con tres triples seguidos para comenzar las hostilidades, uno del uruguayo y dos esquinados (y preciosos) del estadounidense.
Entre medias, Kravic dominando la zona (21 tantos) pero no el rebote: el Estudiantes tiene un socavón mayúsculo en la protección del aro. Si el Ourense le atrapó 20 ofensivos y el Castelló, 14, el Palencia no se quedó atrás con 13 (8 hasta el descanso) para apilar 17 tantos en segundas oportunidades. 8 de ellos entre los altos, Vaulet, Krutwig y Chema González. Un mal sin remedio sin Garino (cuarto duelo de baja por unas molestias). Y la próxima semana hay viaje a Santiago para hacer frente al Monbus Obradoiro de Balvin, Brodziansky…
Y una dificultad añadida, si Jayson Granger está tan apagado como este domingo: mal en el tiro (9 puntos, 2 de 11 en el lanzamiento), pero bien en la asistencia con 9 de las 23 ramireñas.
La alegría por la carrera y la foto dio alas a los de Pedro Rivero, que arrancaban ante el Súper Agropal el Tourmalet que les queda hasta final de temporada. Fue la clásica tormenta de salida frente a rival fuerte: parcial de 22-12 con 10 tantos de Kravic que era imparable en la pintura. Pero esa gasolina, ese ímpetu se agotó. El Palencia se asentó en pista y empezó a carburar su lanzamiento exterior. Que explotó en un segundo cuarto absolutamente demencial: 30-36 de parcial en esos diez minutos. Todo entraba. Tobias Borg se desmelenaba con 15 puntos y un 4 de 5 en triples. El sueco solo hizo un tanto más tras el intermedio (20). Y Rodríguez empezaba a bailar de todas las formas posibles para descerrajar 14 de sus 20 puntos al descanso en ese periodo. Nada mal. No había defensas. Todo era un desmadre y el Estu se escapaba solo uno arriba (59-58).
A la vuelta de vestuarios, máxima igualdad. Todos golpeaban. Todos respondían. El Estu acumulaba problemas con las faltas en el puesto de 3-4 con Alderete y Rubio con tres por barba. Al Palencia se le cerraba el aro desde el perímetro y los colegiales se marchan 5 arriba (81-76) con un triple de Andric.
Los castellanos no se arrugaron. Kunkel lideró un 2-10 de salida que parecía herir a los madrileños, que esperaron a su momento, a esos seis minutos finales para descabalgar a lomos de Rodríguez y Schmidt a un rival que dio un pequeño susto en los instantes finales de la mano de Wintering (bien el excolegial con 21 tantos). Nueva victoria para la 22ª en 25 partidos antes de la gran batalla de Santiago con la duda del rebote.
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