El Leyma Coruña frena en seco al Movistar Estudiantes

A Coruña no es buena plaza para el Movistar Estudiantes en su caminar por la LEB Oro. Dos visitas a Riazor, dos derrotas. Y en ambas sin mucha contestación posible. La temporada pasada, la ola gallega se llevó por delante a Jota Cuspinera del banquillo; y en esta (74-66), cortó la racha de cuatro victorias seguidas con una mala actuación en líneas generales de los madrileños, muy flojos en defensa y con un desacierto mayúsculo en ataque ahogados por la intensidad local: 34,7% en tiros de campo forjado principalmente por el 5 de 23 desde el perímetro. El físico visitante, muy limitado en efectivos tras tres partidos en una semana, tuvo efecto en ese acierto. Debut discreto de Agbelese, que volvía a la acción nueve meses después de su último partido, y Larsen, un partido más y ya van cinco, se quedó fuera por lesión.

Con esta derrota, el Estu se va al parón por la Copa Princesa como tercero, un balance de 15-5 y el ascenso directo, la primera plaza, otra vez a una distancia que parece sideral: a tres triunfos de un Zunder Palencia que tiene un ritmo muy elevado de victorias. Verlo tropezar es una auténtica rareza que no permite fallar como lo han hecho este domingo los ramireños.

Los madrileños se vieron superados ya en el primer cuarto. Con Nwogbo aplastando en la pintura (cerró con 13 rebotes, 3 en ataque y muchos ‘rozados’), el Leyma Coruña se hizo fuerte en el marcador con ventajas que llegaron a superar la decena (20-9) sin encontrar resistencia más allá de algún que otro destello individual de los colegiales, que se derrumbaban desde el triple: 2 de 8. Viven y mueren desde el perímetro y con los chispazos de talento en el uno contra uno, pero a diferencia de otras ocasiones, este no llegaba con ventajas claras gracias para el lanzamiento a media distancia a los bloqueos. Todo era forzado y la zona puesta por Epi y la tres faltas rápidas de Jawara, tampoco les ayudaron.

A pesar de esos males, los colegiales se agarraban al duelo con un 2+1 de Adams Sola nada más comenzar el segundo periodo (20-17). Un triple de Simeunovic, un 2+1 de Diagne y un lanzamiento frontal y muy elegante de Font estiraban de nuevo las distancias para los gallegos, que sabían cómo mantener el control del partido. El 40-31 del descanso era un alivio para los visitantes que solo habían repartido una asistencia en 20 minutos. El Leyma, 11. Mayor facilidad en la circulación del balón, mejor juego.

El Coruña estuvo cerca de romper en dos ocasiones el duelo en la segunda parte: con el +14 (49-35, min. 24) y con el +16 (67-51, min. 34). Pero el Movistar volvía. No sé sabe muy bien cómo, pero regresaba. Eran momentos de inspiración, de buenas manos en defensa e irse a la guerra en el rebote. Leimanis, incluso, tuvo un triple para dejar la diferencia a solo cinco en el minuto 25: falló. Barrueta, no, y el intento de abordaje acabó en el mar al igual que las opciones de los colegiales que no encuentran manera de asaltar A Coruña.