El caso Bagayoko recuerda al de Biyombo: cláusula de 1,1 millones con el 40% para el tutor
El jugador del Fuenlabrada comunica la rescisión unilateral de un contrato hasta 2026 en el que solo el 60% de la indemnización es para el club, que entiende que hay una operación escondida con un tercero.
El pasado 30 de junio el Baloncesto Fuenlabrada, como explica el club en un comunicado, recibió un documento firmado por el jugador Bassala Bagayoko (ala-pívot de 2,07 metros y 16 años, natural de Mali) y su tutor legal, José María Jabardo Martín, en el que informan al club de su decisión de resolver de manera unilateral el contrato que les unía a la entidad madrileña. “Resolución que se realiza sin alegar motivo alguno de incumplimiento por parte del club”, explica el Fuenlabrada, que añade que el contrato fue firmado por el jugador, sus padres y el citado tutor, regulando desde entonces las relaciones entre ambas partes. “El Baloncesto Fuenlabrada, como no puede ser de otra manera, actuará en adelante adoptando todas las acciones que considere necesarias en la defensa de sus intereses”. Hasta ahí el comunicado.
El contrato y la indemnización
La realidad del contrato jurídico laboral que se rubricó en septiembre de 2020 por todas las partes es que era por seis temporadas, hasta junio de 2026, con opción de corte por parte del club al finalizar la cuarta campaña, el próximo verano. Una apuesta importante por un jugador que en el mes de la firma cumplía oficialmente 14 años, y cuyo fichaje se logró tras competir con ofertas parecidas de otros dos equipos de la ACB, el Baskonia y el Joventut. La diferencia más sustancial es que el Fuenla aceptaba recibir solo una parte de la cláusula de rescisión del jugador, cifrada en 1,1 millones de euros, en caso de ejecutarse. Es decir, de esos 1,1 millones, el 60% sería para el club y… el 40% para el citado tutor, Jabardo Martín, que firmó el contrato en 2020 y ahora también la resolución unilateral del mismo. A todo esto, Bagayoko está lesionado, recuperándose de la grave lesión en la rodilla derecha que sufrió el pasado noviembre, una rotura del ligamento cruzado anterior y del menisco externo, que le tiene de baja desde entonces.
Lo que parece es que hay un claro interés por parte del tutor y del jugador en realizar una futura operación con un tercero dejando al Fuenlabrada sin compensación económica, lo que lastraría la apuesta de la entidad por la cantera y por Bagayoko. En el Fuenla meditan las acciones a tomar para asegurarse una indemnización, ya que se intuye muy complicado que el ala-pívot acabe jugando con el equipo, que el próximo curso buscará el ascenso a la ACB desde la LEB Oro. De hecho, el Fuenlabrada confiaba en él como uno de sus bastiones deportivos, de ahí que le hiciera debutar en abril de 2021 con solo 14 años y 7 meses superando el anterior récord de precocidad de la Liga, el de Ricky Rubio con el Joventut (14 años y 11 meses).
El caso de Biyombo en 2011
Se avecina caso Bagayoko y tiene cierto paralelismo con lo sucedido con Bismack Biyombo en 2011. El poderoso pívot congoleño se marchó entonces con 18 años a Portland, a jugar el Nike Hoop Summit (un partido para grandes promesas internacionales) en contra del deseo del club a pocas jornadas de que terminara la Liga Endesa, y ya no regresó Fuenlabrada. Acabaría al curso siguiente en la NBA, en los Charlotte Bobcats de Michael Jordan, una vez que se levantó el cierre patronal (lockout) que coincidió con el inicio de la campaña 2011-12. Sin embargo, en medio, hubo una gran batalla por los derechos del jugador. El Fuenlabrada, tras reunirse con el propio Jordan en Estados Unidos, y tras recibir bastantes presiones, terminó logrando una indemnización en concepto de rescisión del contrato de 1,5 millones de dólares. El jugador había demando previamente al club para evitar el pago de la cláusula, pero en diciembre de 2011 los tribunales desestimaron la petición.
El contrato era válido, Biyombo quería romperlo y el club tenía derecho a ser indemnizado. Y así fue, con 1,5 millones de dólares. Ahora, 12 años después, se da una situación con ciertos paralelismos, con Bassala Bagayoko queriendo romper un compromiso vigente hasta 2026 que establece una cláusula de 1,1 millones, aunque el 40% sea para el tutor legal, el mismo que firma ahora el documento que comunica de forma unilateral la resolución del contrato. Atentos.