Hilliard asume su papel de líder
Jugador de enorme pedigrí, su presencia da un salto de ambición en Bilbao. “Todavía soy joven y disfruto mucho enseñando”.
Detroit Pistons, Grand Rapids Drive, San Antonio Spurs, Austin Spurs, Baskonia, CSKA Moscú, Bayern de Múnich, Maccabi Tel-Aviv, Pınar Karsıyaka, Breogán, Unics Kazan y Bilbao Basket. No es una lista de equipos de una liguilla variopinta. Es el currículo que luce Darrun Hilliard, uno jugador con enorme pedigrí que se comprometió por el equipo de Miribilla muy temprano y que su sola presencia ya da un salto de ambición tremendo. Porque viene de hacer un campañón en Lugo y tenía otras propuestas más jugosas en lo económico, pero hoy, en la presentación oficial en el hotel Puerta de Bilbao, en Barakaldo, ha confesado que le mueven otras motivaciones al margen de la económica. La mini-Barba, porque no llega al volumen de pelo de Harden pero también le acompaña y es una seña de identidad desde hace años, habla con pausa, le entienden hasta los que no dominan el inglés, sonríe asiduamente y muestra una humildad impropia de alguien que está a un nivel top en Europa.
El club vizcaíno celebra el aterrizaje de un hombre con mucha experiencia, calidad y capacidad de anotación, que puede sumar puntos desde el tiro de tres, penetrando y en situaciones de contraataque. un grandísimo manejador de balón. El nuevo ‘hombre de negro’ jugó 91 partidos en la NBA con Detroit Pistons y San Antonio Spurs entre 2015 y 2018 antes de iniciar una carrera en Europa y acumula 150 citas de Euroliga. Pero, claro, su carrera ha tenido una doble vertiente: uno más en superpotencias como Baskonia, CSKA y Maccabi y gran estrella en equipos como Bayern, Breogán y ahora el Bilbao Basket.
Asume el rol de líder que ya desempeñó la pasada temporada en el Pazo Universitario y no se propone arrasar con estadísticas, sino ayudar a resto de compañeros a que crezcan. Buen maestro van a tener. De hecho, el director deportivo, Raya Pueyo, que se adelantó a muchos competidores en un movimiento de mercado fantástico, no escatima elogios para el alero, que en Miribilla va a jugar de tres: “No es un jugador egoísta. Siempre piensa en el equipo y es un buen defensor. Además en esta primera semana de entrenamientos nos ha demostrado que tiene una muy buena mentalidad. Es trabajador, disciplinado y un líder dentro de la pista. Tenemos un jugador de primer nivel que esperemos que nos ayude a competir muy bien”.
Hilliard se quita de encima cualquier afán de notoriedad: “A lo largo de mi carrera, en la NBA o en la ACB en el Baskonia, he tenidos otros roles de tirador y jugador ofensivo, nunca como líder como en Breogán o ahora en Bilbao. Tengo muchísimas ganas, no por ser protagonista. Todavía soy joven y disfruto mucho enseñando”. A sus 32 años y con 1,98 de altura, tuvo una etapa puente en Rusia entre el Breogán y el Bilbao Basket. Con la permanencia asegurada, se fue a ganar unos cuantos dólares al Unics Kazan. En Lugo disputó 26 partidos en la Liga Endesa con el Río Breogán promedió unos buenísimos 13,6 puntos, 3,7 rebotes y 3,3 asistencias por encuentro, que le han catapultado a ser jugador muy codiciado.
Se define como amigo de Jaworski, el otro norteamericano del Surne, y casi ficharon a la vez, por un efecto contagioso. Aseguró el de Pensilvania que, aunque disponía de más ofertas, algunas de ellas de “más dinero”, valoró sobre todo lo rápido que se ha aclimatado su círculo más cercano a España. “No es fácil rechazar más dinero, pero estoy en un punto de mi carrera en el que quizás me centre menos en el dinero y más en mi familia y sabía que Bilbao era un lugar fantástico para ellos. Además, el club tiene una historia muy buena. Así que al final no fue una decisión muy difícil”, reflexionó.
Hilliard, además, no cree que salir a defender el título de la FIBA Europe Cup suponga una carga extra sino más bien “un aliciente” tanto a nivel personal como colectivo. “Es una presión buena, no lo veo como algo negativo. Tener como objetivo repetir una victoria y ser campeones es algo muy bueno para el jugador y para el equipo porque también crecer el nombre del club. Quizás este año el Bilbao Basket pueda superar sus expectativas y tener objetivos más altos como el playoff”, finalizó.
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