El Real Madrid preguntó por Patrick Beverley

Chus Mateo dejó claro hace unas semanas que el Real Madrid está atento al mercado, pero no va a fichar por fichar. Uno de los jugadores a los que ha ‘tocado’ en este tiempo ha sido Patrick Beverley que, sin sitio en la NBA, decidió fichar este verano por el Hapoel Tel Aviv, que disputa la Eurocup. El jugador lo reconoció en su podcast PatBevPod. “Algunas franquicias NBA me llamaron, pero me dijeron que no podía decir cuáles, así que aunque quiera, no puedo. Pero también se pusieron en contacto conmigo equipos de la Euroliga, el Real Madrid me llamó y otro par de equipos para saber cómo iba la cosa...”.

Y la cosa en el Hapoel Tel Aviv no iba del todo bien. Johnathan Motley había plantado al equipo (dejó de ir a entrenar sin ningún motivo) para marcharse al Estrella Roja, aunque desde el Hapoel pelean porque que la FIBA no dé validez a su ficha y no se pueda desvincular del club israelí. Y claro, sin Motley en el equipo, Beverley se siente ahora un poco solo. “Fiché por este equipo un poco por él, porque jugamos juntos en los Clippers y él era mi novato. Nosotros éramos un poco el Shaq y el Kobe del equipo, Stockton y Malone... Era una salvajada lo que estábamos haciendo”, comenta el jugador, que añade que fichó por el Hapoel porque quería estar ahí y ganar, aunque también explica que la salida del equipo, con la situación en Israel, es bastante fácil; algo, eso sí, que él no se plantea. “Siempre se puede usar la guerra como una razón para irte. Esa fue la excusa que usó: ‘No me siento seguro aquí’. Otro jugador del Maccabi hizo lo mismo, se llama Jordan Loyd. Los jugadores reciben dinero, porque Israel paga una tonelada, pero tras un par de meses usan la guerra para irse a otro lugar. Está el tema jodido”.

Con la lesión de Andrés Feliz, el Real Madrid se quedó un poco corto en el puesto de base, aunque la vuelta del dominicano, que ha empezado a hacer alguna cosa sobre la cancha, está más cerca. Beverly hizo carrera en el baloncesto europeo antes de tener una oportunidad en la NBA donde disputó 666 partidos entre Houston, Clippers, Minnesota, Lakers, Chicago, Philadelphia y Milwaukee. Un base sin pelos en la lengua (“Ahora resulta que todo el mundo es reportero de CNN”, dijo cuando muchos le criticaron por su marcha a Israel) y que ha llegado a Tel Aviv porque quiere demostrar que también puede ser un líder en ataque. Por ahora, promedia 12,8 puntos, 4,3 rebotes, 3,9 asistencias y 1,8 robos para 17 de valoración en la Eurocup. Número y veteranía que, está claro, han llamado la atención de alguno de los grandes.

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