NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA
18/12/23
GALAAS 2023 GALA AS
PREMIOAS PREMIOS AS DEL DEPORTE ENTREGA DE PREMIO
18/12/23 GALAAS 2023 GALA AS PREMIOAS PREMIOS AS DEL DEPORTE ENTREGA DE PREMIO JESUS ALVAREZ ORIHUELADiarioAS

PREMIOS AS 2023

El Madrid de los sueños

Felipe Reyes recoge el Premio AS por la Euroliga de las hazañas: “La del esfuerzo y el sacrificio, la de un éxito increíble”.

Actualizado a

Si nos dieran un baúl para guardar los acontecimientos deportivos de 2023, la undécima Euroliga del Real Madrid estaría dentro, seguro. Pero si solo tuviéramos un cajón pequeñito para preservar el recuerdo, igualmente habría un espacio privilegiado para la gesta. El Premio AS del Deporte era obligado, lo recogió, en el Teatro Real, Felipe Reyes, embajador del baloncesto madridista y otrora gran capitán: “La Euroliga fue increíble, no solo por la final, sino por lo que pasó en el playoff ante el Partizán, en una eliminatoria que teníamos prácticamente perdida. Ahí demostró el equipo lo que es el Real Madrid, que nunca se da por vencido y lucha hasta el final. Es el ADN del club. El esfuerzo y el sacrificio dieron sus resultados”.

Mientras, sus excompañeros acababan de aterrizar en Belgrado, donde visitan este martes al Estrella Roja para abordar el enésimo obstáculo del nuevo desafío: la Duodécima. “Hay un equipazo y estamos en un muy buen momento, pero la temporada es muy larga y es en mayo cuando debemos estar bien porque empezamos a jugarnos las cosas importantes”.

Ahora, sin embargo, toca saborear la conquista de Kaunas. Aquel 21 de mayo fue el colofón de película a un camino muy difícil y, en concreto, a un último mes de ensueño, donde el baloncesto agarró el testigo del equipo de fútbol y reescribió la historia de la máxima competición continental.

De la canasta legendaria de Llull contra el Olympiacos, a la reacción furibunda frente al Barça en la semifinal con un 0-15 arrebatador rematado por Tavares y Sergio Rodríguez. Y, previamente, aquel playoff frenético e imposible de concebir ante el Partizán, que empezó mal, con un 0-2 y, sobre todo, una feísima pelea en el Palacio, y que acabó con el Madrid elevando el 2-2 delante de 20.000 serbios y remontando en el quinto asalto 18 puntos en cuarto y medio en una exhibición del Chacho; y de Llull y Rudy. Los viejitos, que diría Nocioni.

Eran ellos más Tavares, Hezonja, Musa, Causeur, Hanga, Goss, Ndiaye, Randolph y Abalde los que seguían en pie, porque ese 10 de mayo no estaban ni Deck ni Poirier por lesión, ni el sancionado Yabusele, y fueron ellos junto con Chus Mateo los que dieron la vuelta a una eliminatoria como nunca antes. Tres de los seis (o siete) jugadores principales quedaban al margen para el resto de la Euroliga y el Madrid, pese a la merma, fue el mejor bajo presión.

Hazañas encadenadas que agigantan la leyenda, la del club de las 25 Copas de Europa. Los títulos van por delante, son el mascarón de proa, pero para hinchar las velas hay una plantilla que envidia media Europa, como las instalaciones, la cantera, un respaldo social y una iconografía de enormes jugadores pasados y presentes que, incluso desde la NBA, mantienen el vínculo con el club. Los pilares de un equipo campeón. Para ganar la Euroliga y repetir, toca ser el mejor en casi todo.

Premios As 2023: consulta el especial con todos los premiados