¡Tenerife, bicampeón!

Los cinco mil incansables seguidores del Manresa plantaron un Nou Congost en Miribilla, y aún dejaron libres otros cinco mil asientos, para los 300 llegados desde Canarias, más el puñado de israelíes y de alemanes, que se quedaron tras presenciar la lucha por el tercer y cuarto puesto, que se llevó el Ludwisburg ante el Holon (88-68). Antes de la entrega de la copa, el pabellón fue un clamor de ambas aficiones españolas unidas en un coro: “¡Teeeenerifeeee!”. Enorme deportividad que ahoga incidentes protagonizados por seguidores hebreos en Bilbao, con dos detenidos.

Al Manresa cabe hacerle muy pocos reproches. "La temporada sigue siendo histórica", proclamó Pedro Martínez. Y es verdad. Es el justísimo equipo revelación en la ACB por sus enormes virtudes y tienen al MVP de la Champions, un Moneke que es puro espectáculo. Una delicia encima con mucho márketing. Pero cuando te enfrentas a un base del calibre de Huertas y un equipo que durante la final estuvo en 70 por ciento en tiros de campo, sólo cabe rendirse a la realidad. Si una de las opciones del BAXI era esperar algún titubeo del favorito, no le regalaron ni medio tiro. Le mataron a base de triples. Vidorreta es profeta en su tierra.

El partido era pura pasión, con el Manresa llevado en volandas por la marea roja. Un triple de Maye puso la mayor ventaja para los catalanes: 50-46. Moneke recibió un golpe involuntario de Shermadini en la lucha por un rebote y empezó a sangrar por la nariz. Al empezaba a torcerse. Fue como si cayera un coloso, la inspiración de Pedro Martínez, el icono del Nou Congost y de la ACB. El BAXI se agarraba con uñas y dientes a un encuentro que empezaba a dejar patente que su gasolina es ya justa a estas alturas de curso. Era imposible seguir el ritmo anotador de los canarios. Del 54-57 se pasó a un 56-66 con triples de Doornekamp, Salin y Wiltjer. El Lenovo cuidaba el balón, sin pérdidas ante un rival tan físico. Estaba ya en la ola buena y nada le podía frenar. La máxima diferencia se estableció en 71-89. Fiesta por todo lo alto del bicampeón. Un millón de euros a la saca de premio, que no está nada mal, y 400.00 para el segundo. Intercontinental, allá vamos.

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Vidorreta confiesa sentir una "emoción especial" 

Vidorreta, confesó sentir una "emoción especial" por haber ganado la Champions en su ciudad, Bilbao. "Ha sido una experiencia única. En la grada estaba mi mujer, mis hijos, sobrinos, amigos. Para alguien de lágrima fácil ha sido una experiencia única", comentó el técnico vasco, quien antes subrayó también que "lo importante no es sólo ganar sino el cómo hemos ganado".

"Que solo tuviéramos seis pérdidas en los primeros tres cuartos contra un equipo tan físico ha sido clave. En el descanso les dije que estábamos en modo de 'Canarias de calidad', pero que también necesitábamos bajar al barro y ser mas inteligentes y lo hemos conseguido dándole más solidez al juego", explicó.

Vidorreta destacó también el gran ambiente vivido en Miribilla a pesar de que los aficionados del Manresa, unos cinco mil, eran muy superiores en número a los del Tenerife, que fueron unos 300. "Una Final Four me gusta con público, me da igual que sea en contra. No es porque sea de aquí, pero hemos tenido mucha suerte de que la final haya sido en Bilbao", dijo.

Añadió el entrenador del CB Canarias que, si la BCL que ganaron en 2017 fue "a base de defensa y defensa", en esta ocasión ha sido por "el talento" de jugadores como Marcelinho, Fitipaldo o un Salin al que calificó como "el gran tapado y uno de los mejores jugadores de la competición".

Por último, Vidorreta dedicó la victoria a Aurre, entrenador del Loiola Indautxu júnior femenino fallecido esta semana en Huelva mientras participaba en el Campeonato de España Júnior y con el que coincidió en sus inicios como técnico en el Maristas de Bilbao. "Este título va para Álex, su mujer y sus hijas. Seguro que algo ha tenido que ver", dijo antes de abandonar, emocionado, la sala de prensa de Miribilla.

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Marcelinho: "Seguiré tirando del carro"

Marcelinho Huertas, MVP de la final que en 17 días cumple 39 años, avanzó tras la victoria ante el BAXI Manresa en Miribilla que "mientras pueda seguir compitiendo" seguirá "tirando del carro" de su equipo. "Quiero seguir disfrutando, aprendiendo, venir con hambre a entrenar, con ambición, seguir mejorando hasta que pueda. Me siento bien, no tengo el mismo físico que hace diez años pero la cabeza sigue estando bien y mientras pueda seguir compitiendo seguiré tirando del carro", dijo el base paulista cuando le preguntaron por su futuro.

Marcelinho, de todos modos, quiso destacar "el trabajo del equipo", considera "estupendo". "Venimos cada día a trabajar y a prepararnos para cada partido con la misma seriedad, al margen del rival, y eso nos ha permitido ser un gran equipo no solo en la ACB, sino que en la Champions League igual", se felicitó el internacional brasileño.

El MVP de la final se acordó que de las dificultades que tienen las competiciones "cuando te llegas a jugar todo a un partido". "Los últimos dos últimos años no salió como queríamos, pero dice mucho del trabajo del equipo lo que hacemos todo el año. Somos un equipo muy sólido", reflexionó.

También ha destacado Huertas la "fiesta magnífica en la grada las dos aficiones". "Ellos en mas cantidad, pero nosotros tuvimos tranquilidad e hicimos nuestro baloncesto, solidario, de saber mover la pelota, de ser fieles al plan de juego y creer hay que creer en lo que hacemos", resaltó.

"Tuvimos acierto y eso nos permitió en momento clave abrir una brecha que nos dio cierta comodidad. Hemos sabido ganar defendiendo como perros, pero nuestros especialistas de tres puntos han tenido un acierto importante y nos han permitido estar donde estamos hoy", destacó a los tiradores del Lenovo Tenerife.

Pedro Martínez: "La temporada seguirá siendo histórica"

Pedro Martínez subrayó que, a pesar de la "frustración" por haber perdido la fina frente al Lenovo Tenerife (87-98), la temporada de su equipo "seguirá siendo histórica". "Evidentemente queríamos ganar y ahora es normal estar decepcionados, pero hay que levantarse y perseverar. Hay que hacer una valoración positiva de la competición, ser críticos con las cosas que podemos hacer mejor. Así es la vida", reflexionó el técnico catalán en la rueda de prensa posterior al partido.

Martínez reconoció que el Tenerife fue "muy superior" al Manresa. "En la primera parte supieron como atacarnos y meternos en problemas y en la segunda intentamos ajustar la defensa, pero tiraron muy bien de tres y ahí se ha roto el partido. Hemos tratado de volver con una buena mentalidad, pero no ha sido posible. Nos faltó un poco de energía", explicó.

Por otro lado, se mostró "orgulloso" de la afición manresana que se ha desplazado en masa este fin de semana a Bilbao, en torno a los cinco mil en la final.

"Ahora tenemos un sabor amargo porque nos hubiera gustado ganar y celebrarlo con ellos, pero los valores que han demostrado y el cómo han creído en nosotros tiene que continuar", recalcó.

Los aurinegros vengan el sabor amargo de su última final, hace ahora tres años, cuando la Virtus de Bolonia se llevó la Basketball Champions League tras vencer en la final al conjunto canario por 61-73. Con su título, el Lenovo Tenerife le da a la Liga Endesa su título continental número 39, con una cosecha de 9 entorchados europeos en la fructífera última década.

Nueve equipos han ganado algún título europeo: Real Madrid, FC Barcelona, Joventut, Valencia Basket, Unicaja, Baskonia, Lenovo Tenerife, Hereda San Pablo Burgos y el extinto CB Girona. Al BAXI Manresa le queda el orgullo mostrado y el honor de ser el sexto finalista continental, después de que lo lograsen Zaragoza, Bilbao Basket, Estudiantes, Gran Canaria y Coosur Real Betis.

De los 15 clubes ACB que consiguieron alcanzar una final continental, 12 participan en la actual Liga Endesa 2021-22. La escuadra de Txus Vidorreta, además, sucedió al campeón de las dos últimas ediciones de la BCL, un Hereda San Pablo Burgos que permite que la suma ya ascienda a tres títulos de Basketball Champions League consecutivos para los conjuntos ACB.

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