BCL | 9ª JORNADA
El Brose Bamberg arrolla al Casademont Zaragoza
El equipo maño pierde su primer partido en la segunda fase de la Champions después de una actuación desastrosa desde el primer minuto.
El Casademont Zaragoza se vio arrollado en su visita a la pista del Brose Bamberg alemán en donde perdió por 41 puntos y recibió 117 en una partido nefasto y en el que ya desde los primeros minutos se vio superado en todos los aspectos por su rival. El equipo aragonés se encontraba invicto en el grupo L tras sumar dos triunfos en otros tantos encuentros -uno de ellos ante los germanos- y una victoria en Baviera le hubiera supuesto dar un paso de gigante hacia la fase final de la Liga de Campeones.
Sin embargo, volvió a evidenciar los mismos errores que en los tres últimos encuentros en la Liga española en los que sus rivales han anotado más de cien puntos demostrando que no ha sido capaz de aprender de la experiencia. Con una nula defensa y sin juego colectivo en ataque, no pudo con un conjunto teutón al que le iba la vida en el enfrentamiento porque, tras dos derrotas, ganar era lo único que le aseguraba seguir con opciones en la competición y eso se dejó notar sobre el parqué.
Los hombres de Johan Roijakkers fueron infinitamente superiores a un equipo maño errático y que no supo responder atrás en ningún momento, pero tampoco en ataque donde la respuesta que se intentó dar fue mayoritariamente individual y no colectiva. En Zaragoza, el Casademont dejó en 65 puntos anotados a los alemanes y en la pista de estos esos puntos los habían anotado ya en el minuto 23 de partido, lo que da muestra de la diferencia de un partido y otro.
El primer cuarto no presagió nada bueno para el conjunto aragonés ya que, lejos de mejorar en defensa con respecto a anteriores encuentros era incapaz de frenar la producción ofensiva de un rival con las ideas mucho más claras. El Casademont tenía muchos problemas en el bloqueo y continuación y los germanos anotaban con gran facilidad dentro y también fuera porque cuando no podían resolver en la zona, su buena circulación del balón y el acierto en los triples comenzó a generar ventajas que se fueron incrementando progresivamente con un gran acierto en los triples. Y la tónica siguió durante todo el encuentro porque las diferencias fueron subiendo producto del decaimiento moral visitante que supuso que los 'minutos de la basura' se alargaran todo el último cuarto y fueran muy prolongados y dolorosos porque su rival en ningún momento bajó el ritmo.