El Bilbao Basket mata sus horas previas al estreno en la fase final ACB con el cosquilleo que le denota que está ante un gran momento. Pero con la preocupación de que el recién renovado Brown causa baja y Kulboka no estará en el estreno de mañana ante el Baskonia "al 90 por ciento", en palabras del técnico Mumbrú. Y más adelante se irá viendo. Eso obliga a un esfuerzo de los demás en un formato tan concentrado. En la posición de tres solo tiene a Sergio Rodríguez y el jugador lituano, que iba a bajar a esa demarcación en ocasiones, ya no podrá echar una mano. Así que toca jugar con dos bases o dos escoltas en ocasiones. "Vamos a tener que ir ajustando a todos y que asuman roles diferentes. Habrá que buscar la mejor manera de ser competitivos. A ver cómo es capaz Rafa (Martínez) de ir pasando los partidos", detalla el preparador del RETAbet en alusión a la veteranía del exjugador taronja.

El problema de tener un equipo tan corto es evidente ante plantillones como los que va a haber enfrente: "Nos encantaría competir por el título en este formato pero se antoja complicado, porque no tenemos una plantilla de 14, vamos a ir al límite. Pero soy competitivo y los jugadores, también, y vamos a dar guerra e intentar hacer las cosas bien"..

El técnico barcelonés considera que el partido no tendrá nada que ver con el del 13 de octubre en Miribilla, que supuso otro sorprendente triunfo bilbaíno, ya que los baskonistas recuperan a Vildoza y Granger. "Han cambiado de entrenador y tienen una manera diferente de defender y atacar, son más agresivos. Además, nosotros jugábamos en casa y ahora estaremos sin público. Es un extra que no tendremos y hay qué ver cómo nos influye. La situación es igual para todos después de dos meses en casa y tres sin jugar un partido", sostiene el exinternacional. Sabe este que nadie va a llegar en su mejor momento físico y que la cabeza jugará un factor importante tras tanto tiempo lejos de la Liga, así que influirá en acciones en las que muchos jugadores llegarán tarde o en los porcentajes de tiro exterior. 

El equipo pasa la plantilla mucho tiempo jugando a las cartas en su cuartel general "pensando en el partido contra el Baskonia, tenemos ganas de jugarlo", precisa Schreiner que va a cubrir en La Fonteta su última hoja de servicio al club. Considera al cuadro vitoriano un plantel "top de Euroliga", así que "va a ser muy difícil", pero "si hacemos las cosas bien podemos competir contra cualquier equipo de esta Liga".