La Euroliga anunció el lunes que ponía punto final a la temporada 2019/20 por el coronavirus. Antes del parón de marzo, la competición vivía un buen momento en cuanto al interés generado entre los aficionados. Este había crecido en un 15% con respecto al mismo periodo de la temporada pasada (de marzo a octubre) en los diez países con equipos en la Liga (España, Francia, Israel, Turquía, Alemania, Italia, Lituania, Grecia, Rusia y Serbia). El mayor crecimiento correspondía a Francia (un 41%), que volvía a tener un equipo en la máxima competición continental, el Asvel Villeurbanne. En Israel el aumento del interés se fijó en un 38%, en Turquía en un 28% y en España en un 23%.

La Euroliga también ha vivido un incremento de su presencia digital, con un 15% más de seguidores y un 21% de alcance. Los visionados de vídeo habían aumentado un 25% y el 'engagement'un 46%. Más usuarios únicos (9%), más páginas vistas (22%) y sesiones (13%).

Según los datos de Nielsen Sports, la audiencia televisiva también aumentó en un 15% en los mercados de la Euroliga. El mayor incremento fue en Francia, con un 6.634% más. En España se mantuvo, aunque sí creció en un 81% el consumo en directo tras la llegada de DAZN a nuestro país, que ofrecía todos los partidos. Si la temporada hubiera transcurrido con normalidad, la progresión de otros años determina que el incremento podría haber llegado al 25%.

Por último, la asistencia a las pistas también aumentó en el curso 2019-20. La media fue de 8.676 espectadores, un 12% más que en el año anterior. Con una ocupación del 75%, marzo registraba el mejor mes en la historia de la Euroliga. Hasta que se paró la competición, casi dos millones de personas asistieron a algún partido: 1.943.361.