NBA

Kevin Love dona 100.000 dólares al personal de los Cavaliers

El ala-pívot donó esa cantidad de dinero al estadio de los Cleveland Cavaliers y a todos los trabajadores afectados por el parón del coronavirus.

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Kevin Love, durante un partido de la NBA con los Cleveland Cavaliers
JONATHAN DANIEL AFP

El coronavirus sigue siendo el tema del día en una NBA que sigue suspendida y que se espera que siga así al menos durante 30 días (que perfectamente podrían ser más). La Liga se enfrenta a uno de los mayores desafíos de su historia y a una situación inédita a la que nadie sabe como reaccionar y que está sacudiendo los cimientos de una competición que todavía desconoce cuáles pueden ser las consecuencias exactas de tal crisis.

Uno de los problemas derivados del virus y que afecta a toda la sociedad es el económico. Evidentemente, no solo el deporte, en pausa en la mayor parte del mundo, se ve perjudicado por esta crisis. También hay varios estamentos que se ven con dificultades, sobre todo si esta situación se alarga. Y muchos de ellos están relacionados con el deporte. En el caso del baloncesto estadounidense, nos referimos a trabajadores de una franquicia determinada cuya ocupación se refiere solo a los días de partido, a quienes tienen las concesiones de restauración de los pabellones...

Por eso mismo, empresarios como Mark Cuban, dueño de los Mavericks, ya anunciaron medidas para paliar estos posibles daños colaterales y afirmaron estar buscando soluciones para poder resolverlo todo lo antes posible y pagar de alguna manera a sus trabajadores. En las últimas horas, se ha sabido que Kevin Love se ha unido a esta causa y, tal y como ha anunciado Shams Charania, ha donado 100.000 dólares a la pista de su franquicia, los Cleveland Cavaliers, y a sus trabajadores.

El hecho ha sido increíblemente alabado por todos los estamentos de la sociedad y tieneun doble valor. Sobre todo si tenemos en cuenta el compromiso mostrado por Love hacia todas las personas que hacen posible que se celebren los partidos de la NBA (al menos en Ohio) y que no siempre se tienen en cuenta. El ala-pívot, sin ser directivo, ha tenido una iniciativa que puede ayudar a mucha gente a superar un bache desconocido, de duración incierta y cuyas consecuencias pueden alcanzar una dimensión difícil de imaginar.