EUROLIGA | BASKONIA 60 - 74 ZALGIRIS
Un Baskonia en apuros
Los de Ivanovic no pueden con el Zalgiris de Jasikevicius y tienen cada vez más complicado acceder a un playoff que está más lejos que nunca.
La novedad en Baskonia fue el regreso de Pierrià Henry con una aparatosa máscara. Lo hizo a falta de 2 minutos para el descanso. El partido iba para entonces muy igualado y con pocas dosis de emoción. Arrancó con una canasta de Shengelia y aunque Zalgiris mantuvo el pulso (6-7, min. 5) la buena defensa permitió a los de Ivanovic escaparse en el marcador con el 15-9. Pero Lekavicius en la dirección y el dominio del rebote por parte de los visitantes permitió llegar ajustados al final del primer cuarto.
Rivers se hinchó a fallar triples, cosa que no hizo Christon encadenando dos seguidos. Fue cuando Ulanovas empezó a enchufar mientras que Geben hacía daño en el poste bajo. Detrás del banquillo verde estaba el histórico Robertas Javtokas y quizás eso inspiró a los pívots bálticos. Lo cierto es que el partido fue muy parejo en el segundo cuarto (empate a 21 en su ecuador) y tan sólo un poco más de inspiración baskonista en los últimos ataques permitió a los del Buesa irse 5 arriba al descanso.
Granger, Garino y Vildoza siguen de baja en el equipo vasco mientras que Grigonis no pudo comparecer en el conjunto de Saras Jasikevicius. La falta de competición de Kirolbet Baskonia se notó en los primeros compases ya que no jugó la Copa del Rey de Málaga y tampoco tendrá compromiso liguero este fin de semana por el parón de las selecciones nacionales. Zalgiris venía de ganar la Copa lituana.
Desde Estados Unidos llegó la noticia de que Nik Stauskas se había operado la rodilla en Chicago. Se le detectó una tendinopatía crónica que le obligó a rescindir su contrato la semana pasada. La opción de reforzarse con Marko Todorovic hay que descartarla porque tiene que volver a China el 1 de abril (la CBA está ahora parada) y, en caso de jugar en ACB, sus derechos los tiene el Joventut y al club verdinegro le gustaría contar con él.
Baskonia siguió perdiendo el partido por su agujero en los rebotes. Un triple de Walkup colocó a los de Saras por delante (39-40) y sólo la energía de Shengelia y la anotación de Christon mantuvo vivo al equipo. El ambiente estaba gélido en el Buesa porque este conjunto no transmite casi nada. Sólo algunas decisiones arbitrales encendieron un poco a la grada.
El último periodo comenzó con un preocupante 45-51 y con 15-31 en rebotes. Los bálticos superaron la decena de diferencia con un triple de Rivers (45-56, min. 32). El estadounidense empezó a anotarlos en el momento más inapropiado. Tampoco resultaba decisivo ya que, en caso de fallar, lo normal es que el rebote ofensivo fuera lituano. La máxima a favor de los visitantes fue de 14 con el 53-67 y con el resultado final. El basket average particular será para los bálticos (58-70 en el choque de Kaunas en la primera jornada de la fase regular). Los vitorianos lo tienen en chino para entrar en el Top-8.