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BILBAO BASKET

Haws, el misionero mormón que aterriza en el paraíso de Miribilla

Llega para sustituir al lesionado Brown en la antesala de la Copa y promete puntos. Mumbrú agradece el esfuerzo del Bilbao: "No daríamos una buena imagen como entidad si se lesiona alguien y nos conformamos con lo que tenemos".

Haws, durante las pruebas físicas.

Tyler Haws no ha va a romper el buen ambiente que hay en el vestuario del Bilbao Basket. Para empezar, el alero mormón pasó dos años como misionero en Filipinas. Es que tiene una cara de buenazo que se le cae. Eso no quita para que se eleve a sí mismo con elogios para definirse: "Soy un tirador, puedo anotar de muchas maneras, no sólo de tres, también a la media distancia, o finalizar debajo del aro, desde el tiro libre... Tengo la experiencia de haber jugado en España unos cuantos años. Me encuentro cómodo en estos sistemas de juego, aprendo y me adapto muy rápido”. Así lee su carta de presentación. ¿Defectos? "No los digas que les facilitas las cosas a los rivales", zanja el director deportivo, Rafa Pueyo, con una risotada.

El escolta norteamericano nació en Bélgica hace 27 años (1,96). Con el Obra jugó 34 partidos, con una media anotadora de 7,9 puntos en 19 minutos. La temporada pasada militó en las filas de Levitec Huesca, en LEB Oro, promediando 12,9 puntos, 3,6 rebotes y 11,4 créditos de valoración. Comprobó que Miribilla "tiene una afición que aprieta mucho". El jugador completó un excelso ciclo NCCA convirtiéndose en máximo anotador histórico de la Universidad de Brigham Young (BYU). En su último año universitario promedió 22.2 puntos (52.2% en tiros de dos, 36.7 en triples y 87.3 en libres), 4.5 rebotes y 2.4 asistencias.

Confiesa el rubio escolta que Mumbrú le ha pedido "que fuese yo mismo, aportar mis fortalezas al equipo". Venir a mitad de temporada es para él "una situación interesante", aunque el equipo lo está haciendo de cine y tendrá que buscarse su espacio "donde pueda ajustarme al equipo, donde pueda añadir valores y continuar ayudando al equipo para que siga creciendo”, explicó en su puesta de largo el exjugador de Obradoiro y Huesca. Lo primero es coger el ritmo de un tren que va a toda marcha y al que se tiene que subir en marcha. Su padre tiene un club en Estados Unidos e iba al gimnasio todos los días, entrenaba con otros jugadores. "Me hizo mucha ilusión recibir la llamada del Bilbao Basket y poder aprovechar esta oportunidad”, analizó. Desde luego seguro que no fue el sueldo lo que le trajo hasta aquí. Lo de sustituir a Brown, uno de los héroes del ascenso, no va a ser fácil, aunque se desmarca con que  son muy diferentes.

Mumbrú, en el lado de la pizarra, reclama calma con el muchacho: “Lo primero que va a necesitar es tiempo para adaptarse, coger nuestras reglas y la manera en la que jugamos. Esto no se hace en una semana ni en dos. Trataremos de involucrarle. No hemos fichado un sustituto de Brown, sino a Haws, con sus debilidades y fortalezas”. “El mejor fichaje para este Bilbao Basket era Haws”. Agradece el esfuerzo del club por esta contratación, aunque la permanencia está en el bolsillo. "Es importante, se cae un jugador por lesión y que el club esté preparado para poder traer a alguien que nos siga ayudando, y seguir compitiendo. No daríamos una buena imagen como entidad si se lesiona alguien y nos conformamos con lo que tenemos. Y sobre todo de cara a nuestra afición, que se cae un jugador y el club es capaz de traer otro jugador para seguir siendo competitivos"

A los 'hombres de negro' les visita mañana el Unicaja, el "equipo más físico de la ACB" para Mumbrú. Tras la Copa, se marchará más de la mitad de la plantilla, pero habrá tiempo para adaptar mejor a los sistemas a Haws. "Los parones por las selecciones no son nada benévolos para clubes como el RETAbet. Hay tiempo extra para trabajar, pero se marcha el grueso de la plantilla. Lo de las ventanas es algo que no se entiende. Si no juegas Copa paras tres semanas, los grandes pueden seguir haciendo su trabajo y nosotros tenemos que deshacernos de 6-7 jugadores. Nos iría bien poder entrenar con Tyler. Ni va a estar bien ante el Unicaja ni seguramente nos podrá echar un gran cable en la Copa. Vamos a ver si tras el parón podemos sacarle más rendimiento”, culminó Mumbrú. El que jugará mermado ante los malagueños es Rousselle, que arrastra un proceso febril, del que precisamente ha salido Rigo.