El hermano pequeño de los Gasol ficha por el Espanyol
Adrià, que se ha dedicado al baloncesto por afición, reforzará a esta sección no reconocida del club perico que milita en Segunda Catalana.
Mide 2.08 y nunca en su vida ha podido pasar de puntillas por ningún lugar, menos aún apellidándose Gasol y siendo natural de Sant Boi de Llobregat. Adrià, el pequeño de los hermanos de 26 años (Pau y Marc), ha fichado por las Secciones Deportivas Espanyol, un club que han impulsado socios del club perico pero que todavía no ha contado ni con el reconocimiento ni con el apoyo económico de la entidad presidida por Chen Yansheng.
“Desde septiembre estábamos en contacto con él. Ha venido a entrenarse puntualmente, pero por motivos labores no ha podido fichar antes. Ahora se han dado las circunstancias”, explica Arnau Baqué, presidente de las Secciones Deportivas. El equipo es líder en el Grupo de Segunda Catalana y, a falta de diez partidos, tiene el segundo ascenso al alcance de su mano. Su presupuesto es de solo 22.000 euros, con la ayuda de patrocinadores, pericos implicados y de socios.
El hermano pequeño de los Gasol ha crecido siempre a la sombra de su Pau y Marc, triunfadores en la NBA y con la Selección. Adrià fue testigo del debut en 2001 de Pau en la competición estadounidense con Memphis, así como del legendario duelo en el All Stars de 2015 en el Madison Square Garden de Nueva York.
Adrià ha vivido entre Estados Unidos y Barcelona. Estudió Administración y Dirección de Empresas y llegó a entrenarse en la prestigiosa universidad de UCLA. Incluso fue invitado a un Europeo con la Selección Sub-20, pero el nivel de Adrià no era el de sus hermanos. El baloncesto era más un hobby que un reto profesional; de hecho hasta la adolescencia no empezó a interesarse por él.
Ya en Barcelona, jugó en la Liga EBA con el Sant Feliu y alternó otras temporadas jugando en el Sant Joan Despí y en La Palma de Cervellò, dos localidades cercanas a Sant Boi. En los últimos meses trabajaba en Girona en la empresa de su hermano Marc. Ahora vestirá los colores blanquiazules del Espanyol, el club de su abuelo, quien, cuando eran niños sus nietos, los llevaba al estadio a ver los partidos.