Día de reencuentros para Mumbrú: Badalona y Duran
Pisa el Olímpic, donde ha sido amado y pitado, esta vez como entrenador. "Siempre es especial volver a casa". En su última visita le tributaron un bonito homenaje. Se enfrenta a otro de los técnicos de su carrera.
Mumbrú abrió su carrera como técnico en la ACB midiéndose a Vidorreta, uno de los entrenadores de su larga etapa como jugador. Ganó al Tenerife y fue un pistoletazo de salida dulce. Con Txus no compartió muchos meses, porque vivió el final de la carrera del técnico de Indautxu en el club de sus amores, el Bilbao Basket. También se enfrentó al Granca de Katsikaris, otro de sus extécnicos, y con él perdió la imbatibilidad en casa. El domingo se enfrenta al Joventut y a Carles Duran, una doble vía que le revuelve muchas mariposas por dentro. En la Penya se formó y se fue dos veces al Madrid, uno de los eternos enemigos, algo que muchos no le perdonaron nunca. Y Duran ha sido uno de los entrenadores con los que congenió en Miribilla, aunque también vivió su cese. Ambos son de la escuela Aíto, al fin y al cabo, y han mamado un baloncesto con similares patrones.
No es un día más, desde luego; gran parte de la familia estará en la grada. "Siempre es especial volver a casa, porque es el equipo que me enseñó a jugar a baloncesto, me formó y confió en mí. Le tengo gran respeto, admiración. Conservo muchos amigos en Badalona. Siempre es bonito volver. La última vez me dieron una camiseta, no sabía si iba a volver y da la casualidad de que en dos años aquí estoy de nuevo como entrenador. Intentaré dejar el sentimentalismo fuera y pensar en el equipo", asume el exalero en La Casilla tras el entrenamiento del RETAbet.
Se conocen de sobra y será difícil que puedan sorprenderse mutuamente, pero Mumbrú hace una precisión: "Carles tiene su baloncesto y yo, el mío, he estado a sus órdenes un año y medio y conozco cuáles pueden ser las cosas que hizo cuando estuvo aquí; pero un entrenador dependiendo de los jugadores que tiene, actúa de una manera u otra. No es lo mismo jugar aquí con lo que tenía que allí con Prepelic, como tampoco cuando lo hacía con Laprovittola. Cada entrenador se adapta al equipo que tiene".
La Penya lleva seis victorias seguidas. "Es un equipo que juega muy bien, con grandes jugadores, como Prepelic, Omic, Zisis, Harangody... Vienen de ganar en Zaragoza y Gran Canaria, haciendo un buen partido en Fuenlabrada. Es muy complicado. Mucha culpa de que esté jugando así es de Carles, están haciendo un gran baloncesto en llegada y estático, atacando bien el rebote, en defensa están siendo muy sólidos, aun jugando a muchas posesiones; hay que intentar controlar los 40 minutos y estar duros todo el tiempo". Mumbrú considera que es mejor coger a un equipo cuando está sin confianza, no como este Joventut en la ola buena, "prefiero enfrentarme a un rival que se tenga que ganar la confianza durante el partido... ahora todo lo que hacen les sale bien, es más difícil".