La Selección cumplió con la hoja de ruta marcada: primera de su grupo y directa al cruce de cuartos. Viaje a Belgrado y tres días de descanso por delante, aunque las de Mondelo no conocerán a su rival hasta el martes: será el segundo del grupo C o el tercero del D.

Las cuentas eran fáciles: si ganaba o perdía por dos puntos se ahorraba el marrón de jugárselo todo a una carta este lunes. España salió con eso en mente, pero sufrió tras casi desperdiciar una renta de 16 puntos. Como está ocurriendo en todo el campeonato, los árbitros permitieron demasiado los contactos y Mondelo estalló al final: “Hemos venido a jugar al baloncesto, no al boxeo”.

Cristina Ouviña, con un canastón sobre la bocina, cerró el primer cuarto con empate a 17. Letonia se quedó clavada en los 21 y la Selección se escapó con un parcial de 0-9. Después, Anna Cruz, con un 2+1 a falta de tres segundos, colocó a España por primera vez diez arriba (25-35). Pero no remató el partido  por falta de puntería: acabó con un 26,2% en tiros de campo.

Parecía que la Selección daba un pasito más hacia cuartos en el tercer asalto con una Ouviña intensísima. La base maña robó cuatro balones y España pudo por fin correr. El dominio en el rebote era claro, gracias al buen trabajo de Nicholls y Ndour (22 rebotes entre las dos). Y aunque los triples siguieron sin entrar (3/10), Xargay al menos recuperó su muñeca (2/4).

"Si somos nosotras mismas, los demás tienen un problema"

Anna Cruz, con dos tiros libres, puso el +16 para la Selección (35-51). El pase a cuartos parecía casi hecho, pero Letonia reaccionó y logró ponerse a cinco (48-53). Faltaban 2:25. Un robo de Dikaioulaku rebajó la renta española a solo tres puntos, que se pudieron convertir en menos tras una falta de Ndour, pero Brumermane falló sus dos tiros. Letonia tuvo otra oportunidad de meterle el miedo en el cuerpo a la Selección, pero perdió el balón. Dos tiros libres de Silvia pusieron el 54-59 en el marcador a falta de 14,4 segundos. Suficiente y a cuartos.

Lucas Mondelo dio a las jugadoras por la mañana una mini-charla con un mensaje claro: “Si somos nosotras mismas, los demás tienen un problema… o dos”. España sigue encontrándose en este campeonato express. A lo largo de estos cuatros días ha descubierto que puede ganar con acierto (Ucrania), en un día aciago y sufriendo hasta el final (Gran Bretaña) o en un ambiente algo caldeado y con un porcentaje de acierto espantoso (Letonia). Sin brillantez, pero deberes hechos y a cuartos por la vía rápida.