La Selección femenina ya está en Riga, donde a partir del jueves (20:00 ante Ucrania) comienza su defensa del título europeo. Pero antes de eso, recibió una cálida despedida en el CSD con la presencia de Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, Carmen Calvo, vicepresidenta, y María José Rienda, secretaria de Estado para el Deporte. "Estamos contentos de poder estar aquí sin haber ganado nada, porque eso significa que el apoyo nos llega desde el principio", dice Laia Palau, capitana eterna de una Selección que encadena seis medallas (dos oros europeos incluidos) en los últimos seis años. "Espero que actos como el de hoy sean algo frecuente en el futuro del baloncesto femenino y del deporte en general".

Pedro Sánchez, aficionado al baloncesto y canterano del Estudiantes en su juventud, destacó que este equipo "es un ejemplo de las cosas buenas que pasan en este país". "Es un orgullo enorme que representéis a España allá donde vayáis. Tenemos la mayor de las suertes", añadió el mandatario que recibió una camiseta con su nombre en el número uno.

España se ha subido al podio en ocho de los últimos nueve Europeos, aunque en éste parte con un primer objetivo previo a las medallas: quedar entre los seis primeros clasificados para disputar el Preolímpico de Tokio. "Nosotros sabemos lo que cuesta cada verano, porque la mochila pesa cada vez más, afortunadamente por nuestros éxitos. Nos reinventamos y por qué no, también lo confieso: odiamos perder", avisaba Lucas Mondelo, el Rey Midas de este deporte que ha convertido en otro todo lo que toca.

"La motivación viene cada verano, porque es un privilegio poder estar aquí", dice Marta Xargay, una de las jugadoras que darán un paso al frente por la baja de Alba Torrens, obligada a descansar por una lesión. "Tenemos la combinación perfecta de veteranía y juventud. Todas aportamos nuestro granito de arena", añade Anna Cruz, otra de las veteranas del equipo (acaba de cumplir 150 partidos con la Selección, aunque a años de "la inmortal Laia". La base del Uni Girona, que en septiembre cumplirá 40 años, intentará colgarse en Belgrado (la fase final se juega allí) su 12ª medalla con España. Lleva 18 años sin faltar a una cita, pero hace suyo el eslogan de este verano: "Queremos más".