Pitos, pañuelos y cánticos contra Javier Juárez. Así despidió la afición del UCAM Murcia a su técnico tras cosechar la séptima derrota consecutiva, esta ante el Morabanc Andorra (67-77). Juárez parece sentenciado y lo curioso es que fue su antecesor en el banquillo universitario, Ibon Navarro, el que le dio el estoque. Andorra ganó fácil después de sentenciar el choque tras el paso por los vestuarios. Walker, con 13 puntos y 16 de valoración, lideró el triunfo del combinado del Principado. UCAM sigue en descenso y en caída libre.

El UCAM Murcia sólo plantó cara en los dos primeros cuartos. Su pésima dinámica le lastró cuando el partido entró en su fase decisiva. En el momento de la verdad, el miedo y los nervios se adueñaron de un equipo que parece sin patrón desde el banquillo.

El primer cuarto ya dio muestras de lo que iba a ser el partido. Morabanc logró una renta cómoda (9-14) tras un parcial de 0-10 que desconectó al conjunto local. Booker con 8 puntos fue el salvavidas al que se aferró UCAM Murcia para no dimitir desde el inicio. En el segundo acto, el conjunto local reaccionó. Se metió de lleno en el partido e incluso llegó a ponerse con cuatro puntos de ventaja (26-22). Antes del descanso, Morabanc volvió a pegar otro estirón para terminar ganado el segundo periodo (29-32).

El paso por los vestuarios no le sentó bien al UCAM Murcia. El Morabanc dio un paso al frente y empezó a pasar el rodillo. El conjunto andorrano se sintió dueño del choque, sobre todo después de mandar en el rebote. Con la máxima ventaja del duelo cerró Moraban el tercer cuarto (47-59).

El último acto fue un paseo para Morabanc y un calvario para Juárez. Su equipo se desconectó por completo y llegó a perder por 18 puntos (52-70). El último arreón del UCAM sólo sirvió para maquillar un partido que estaba sentenciado. Pero el Palacio ya estaba encendido.