El Consejo de Administración de Bilbao Basket convoca su Junta General Ordinaria y Extraordinaria anual el día 27 de diciembre a las 18:00 horas (podría coincidir con elecciones a la presidencia del Athletic si finalmente estas se celebran) para llevar a cabo, entre otras medidas, la reducción de capital en ese proceso para compensar las pérdidas de ejercicios anteriores. De esta forma, se rebajará en 1.246.863€ hasta la cifra de 775.077,00 (con 390.000 euros podría hacerse alguien con el control de la nave si adquiere ese paquete), mediante la disminución del valor nominal de las 67.398 acciones representativas del capital social de 30 euros a 11,5 euros cada una. En los orígenes de la entidad cara título valía 60 euros y ahora queda a casi una sexta parte.

El Bilbao Basket está inmerso en un proceso concursal y esta medida está con consonancia con lo que va dictando el administrador. A partir de ahí, si hay músculo económico para ascender se podría ir a otra ampliación. Además, en un mes se informará sobre la situación actual del consejo de administración (el presidente Koldo Mauraza figura pero está al margen). Se quiere reducir el número de miembros en la directiva y se aprobarán las cuentas anuales correspondientes al ejercicio cerrado el 30 de junio de 2018, así como el presupuesto para el próximo.

El consejo sigue en su tarea por reducir la ingente deuda que dejó Gorka Arrinda. Se intentaba rebajar los seis millones y medio, y había un acuerdo cercano con Hacienda para aplazar el pago. El tesorero, Carlos del Campo, que lleva la voz cantante, afirmó hace unas semanas que era prioritario acabar con esa losa por encima del propio ascenso. El Bilbao Basket solicitó a la ACB recibir de golpe los 1,6 millones establecidos ahora como cuota de participación (que luego hay que reponer en caso de salto desde la LEB Oro), pero no hay muchas esperanzas.