En su retorno a la Liga Endesa, el Baxi Manresa ha recuperado a una de sus figuras emblemáticas, el que fuera capitán del equipo, Joan Peñarroya, de 49 años, que vuelve al club como entrenador tras quince años de ausencia.

 Con jugador estuvo en el Bàsquet Manresa en tres etapas: entre 1987 y 1990; de 1991 a 1997; y del 2001 al 2003. El 30 de marzo de 1998 fue retira su camiseta con el número 9.

Tras iniciar su carrera como entrenador en 2006 en la liga LEB, donde estuvo cuatro temporadas, en la temporada 2009-2010 ficho con el BC Andorra, entonces en LEB Plata, al que ascendió a la Liga Endesa y donde ha estado hasta la última temporada.

Entrenando desde el lunes con la nueva plantilla, aún a falta de la incorporación del Alex Renfroe, que está disputando la liga de Puerto Rico, y del pívot haitiano Cady Lalanne, que está en su país resolviendo trámites con su visado, Peñarroya solo espera, "que Manresa disfrute, se divierta y que se sienta orgullosa e identificada con este grupo que jugadores".

De la plantilla de la pasada temporada en la LEB Oro siguen cinco jugadores :el danés Gabriel Lundberg, el lituano Jokubas Gintvainis, el gerundense Guillem Jou, el congoleño Jordan Sakho, que debutarán en la Liga Endesa, además de Álvaro Muñoz, que ya disputó esta competición con el Fuenlabrada.

La incorporación de jugadores experimentados como el referido Alex Renfrofe, Ryan Toolson, Justin Doellman, que ya jugó en Manresa en la temporada 2011-2012, el mallorquín Pere Tomás, que también retorna al club manresano o el serbio Marko Lukovic conforman un bloque compensado y que espera ser competitivo.

Peñarroya sabe que le espera una tarea difícil pero esta seguro de que el grupo "trabajará bien y con toda la ilusión del mundo para hacer una buena temporada".

No quiso hablar de resultados porque "Más allá de victorias o de derrotas, en ambición estoy seguro de que no nos ganará nadie, lo que queremos es estabilizar un proyecto como el del Manresa".

"Si bien somos un club histórico en la liga Endesa, pienso que el pasado que tenemos que hacer es asentar al equipo en una zona en la que no tengamos un sufrimiento constante sabiendo quienes somos", añadió y continuó, "Somos humildes, somos los más pobres de la competición, pero tenemos talento y ganas de hacer una gran campaña".

Uno de sus anhelos es: "que nuestra afición, cuando salga del Nou Congost, lo haga contenta, que haya desconectado durante dos o tres horas de sus problemas cotidianos y que marche disfrutando y encantada de lo que haya visto en la pista; ese es nuestro objetivo", concluyó el muevo técnico manresano.