La Sub-16 de Garuba no tiene freno y luchará por el oro
La Selección ganó a Turquía en las semifinales y se medirá este sábado ante Croacia (20:30). El pívot acabó con 14 puntos y 18 rebotes. Genial Alderete: 25.
La Sub-16 disputará este sábado su undécima final de siempre en la categoría después de ganar, en un trabajado y genial partido, a Turquía (57-67). Ahora, la última frontera en la ciudad serbia de Novi Sad será la Croacia de Prkacin (20:30, Teledeporte). Solo el equipo balcánico se interpone entre los jugadores de Javi Zamora y el quinto oro europeo en la historia de la Sub-16, la tercera medalla del Verano para la formación española. Sería el primero y único para el masculino tras el séptimo puesto de la Sub-20 en Alemania y la novena plaza de la Sub-18 en Letonia.
España sufrió todo lo que no había sufrido en octavos y cuartos. Durante los diez minutos iniciales, la Selección vivió un intenso cuerpo a cuerpo (11-12) por una sencilla razón: las pesadas torres otomanas (Haltali, Sengun y Bona) hicieron muy bien su trabajo y limitaron a Garuba, que no se sentó en el banquillo en toda la primera parte.
El canterano blanco abrió el marcador desde el triple, pero no encontraba premio a su trabajo en la zona. Entre kilos y centímetros turcos se perdía. Y a pesar de ello, nueve puntos y ocho rebotes para 12 de valoración en 20 minutos sin descanso.
Sin embargo, el tiempo pasaba. Nada cambiaba. Hasta que se presentó al duelo Héctor Alderete. El Nowitzki del Ramiro se soltó a los tres minutos del segundo cuarto y no paró: 25 puntos con 4 de 8 desde el triple y 20 de valoración. Voraz e incansable, rompió a su rival en el segundo cuarto con 14 de los 17 tantos de la Selección en siete minutos. Él solo en ataque, inteligente y disciplinado, sacó de rueda a Turquía con un ejercicio de fuerza en la penetración y eficacia desde el perímetro. Fue él el que puso el +8 (26-34) antes del tercer cuarto.
Y no se detuvo. Un 2+1 y otro triple suyo dejó en nada los intentos de remontada turcos y compró el billete definitivo para la final con otro acierto exterior que colocó un insalvable 53-65 a dos minutos del final. Rubén Domínguez también hizo su parte con sus tres triples (ya suma 18 en este Europeo) y Kennedy Clement fue clave en el rebote ofensivo (tres en once minutos) cuando el viento no sabía a quién debía ayudar. Garuba, mientras, a picotazo limpió, acumuló todo el oro que se le había negado en la primera parte: 14 puntos, 18 rebotes y dos tapones para 25 de valoración. ¿Quién puede parar a estos chicos?