McCallum da la victoria al Unicaja en el último segundo
El base estadounidense rompió el empate desde la línea de tiros libres. Los malagueños rompen su empate a 18 victorias con el Andorra.
El Unicaja frenó su mala racha de resultados al remontar en el último instante un partido en el que siempre fue por debajo en el marcador ante el MoraBanc Andorra y que acabó llevándose
por 87-86 con un gran Sasu Salin (26 puntos).
El Unicaja saltó a la cancha mostrando un juego tibio y nervioso ante un Morabanc Andorra mucho más conectado y acertado ante el aro (11-16 min. 6).
Los andorranos, que mantuvieron durante el primer tramo del encuentro una diferencia que variaba entre los cuatro y los siete puntos, plantearon una férrea defensa que bloqueó a los cajistas en la línea de 6,75 para, finalmente, acabar llevándose la ventaja de los diez primeros minutos con un 21-16 en el electrónico.
Joan Plaza arengó a los suyos y James Augustine, con un triple, impuso las tablas al inicio del segundo cuarto (26-26), en el que los cajistas intentaron abrir la defensa impuesta por los andorranos.
Pero la fórmula no funcionó y a los malagueños se les complicó el partido; faltos de ideas, los cajistas llegaron al descanso del partido con un desfavorable 40-48.
Los minutos fuera de la cancha no le sirvieron a los de Plaza para reaccionar. El MoraBanc siguió a las suyas y, mientras su defensa brillaba por su excelencia, la de Unicaja hacia aguas y Jaka Blazic terminó de hundir a los locales con una canasta que le dio a los suyos una ventaja
de +16 (42-58 Min 25).
Sasu Salin tiró del carro cajista, pero el partido llegó al último tramo con una diferencia de 9 puntos a favor de los visitantes (59-68).
Cuando todo parecía perdido, al Unicaja se le hizo de día en un José María Martin Carpena que acabó entregado. Los verdes salieron como un ciclón, con Ray McCallum liderando y encestando desde la línea de triples. Mucho más acertados, los de Plaza recortaron la diferencia de puntos.
Un triple de Salin desató la locura en la pista y puso al Unicaja por primera vez por delante a falta de cinco minutos (76-73). El partido se puso no apto para cardíacos y a falta de 25 segundos para que sonara la bocina final el Unicaja llevaba la ventaja con un 85-83 en el electrónico.
Ambos equipos pelearon segundo a segundo su puesto en el playoff y Andrew Albicy se encargó de que así fuera con una canasta que puso, de nuevo, las tablas a 86.
A falta de un segundo Carlos Suárez tuvo la oportunidad de romper la igualdad con dos tiros libres, que erró, y McCallum tuvo la misma oportunidad con la que sí rompió el empate y selló el final del partido con un 87-86 al filo del último segundo.
