Fabien Causeur, héroe blanco

El Madrid no firmó un partido redondo en Belgrado ni tampoco este domingo en Málaga. En ambos dominó y se dejó atrapar en el último cuarto, pero en ambos mostró temple y recursos para sobreponerse, para agarrar el triunfo con sendas canastas finales. De las que valen su peso en oro a estas alturas del curso. De ganador. El viernes fue Doncic y esta vez el paso al frente lo dio Fabien Causeur. Protagonista del cierre de una jornada escrita por héroes, como nos dejó claro el estudiantil Landesberg y sus 48 puntos.

No llegó a tanto el escolta madridista, aunque resolvió una batalla fantástica con una entrada por la izquierda en extensión y a tabla. Marcó los pasos, se le vio venir, y más a fuerza de calcar acción durante toda la velada, pero resultó imparable. Causeur encestó a dos segundos de la bocina tras recibir dos posibles faltas no pitadas de Salin y Suárez. El zurdo agrupó 19 de sus 21 puntos en la segunda parte, incluidos los siete últimos del Real en el minuto y medio final. Primero otra canastita por la izquierda y luego un triplazo a falta de 20 segundos bajo un sol abrasador: 86-87.

Era el turno del serbio Nedovic. Entre Taylor y un destacado Randolph le metieron en una cueva de brazos de la que le rescató una falta. A dentro los dos libres, 25 puntos. Opositaba a héroe del Unicaja tras encadenar sus 19 primeros tantos (16 en el segundo cuarto) sin un solo error. Acarició la gloria… y Causeur se la arrebató. El francés había lanzado a su equipo siete arriba (58-65) con once puntos seguidos, aunque luego McCallum concurrió con 14 de sus 20. El Unicaja lo vio cerca con el 81-76 y Tavares fuera de combate por un esguince de tobillo (Campazzo y Ayón eran bajas). Doncic, además, no mostraba seguridad para resolver, pero sí un Causeur soberbio. El Madrid asegura el primer puesto. O casi.