Jasikevicius ridiculiza al Barcelona de Pesic

Si Sarunas Jasikevicius creía tener alguna cuenta pendiente con Svestislav Pesic, se la ha cobrado esta noche endosándole al Barcelona la derrota más contundente de su historia en Kaunas (90-74) en un encuentro en el que la defensa asfixiante de los lituanos descentró al ataque barcelonista, en uno de los peores partidos de Thomas Heurtel como director del juego catalán.

Solo dos jugadores del Barcelona pasaron de los 10 puntos: Oriola, con 18 y Tiomic, con 11, pero fueron superados en el rebote por sus pares lituanos. Además, y no es excusa, si Pesic ya no pudo contar con Seraphin y Sanders para el choque, las lesiones de Moerman y Hanga en el segundo cuarto acabaron con todas las esperanzas de su equipo.

Delante, un Kevin Pangos demoledor (18 puntos, 2 rebotes y 5 asistencias), apoyado por el joven alero francés Axel Toupane (21 puntos) y el ala-pívot estadounidense Aarn White (11 puntos y 5 rebotes), se bastaron para doblegar a un Barcelona que se fue diluyendo a medida que pasaban los minutos.

El Barcelona salió agarrotado, clavado por la defensa agresiva del Zalgiris, perdiendo balones (6 en el primer cuarto) y, lo peor, cediendo cinco rebotes ofensivos y lanzando solo 9 tiros en este cuarto inicial frente a 19 del equipo de Sarunas Jasikevicius.

Aún así, los de Pesic mantuvieron una ligera ventaja inicial (7-9, min. 5), pero un parcial de 8-0, con Kevin Pangos por fuera y Antanas Kavalauskas por dentro, rompía el partido (15-9, min. 8) después de un tiempo azulgrana. El Barcelona cortó la racha con cinco puntos seguidos de Koponen, pero un triple de Milaknis cerraba el primer periodo (19-15).

Tomic y Claver devolvían al Barça al partido (21-19, min.11), pero Jasikevicius paró el partido y abroncó a sus hombres. Tres triples casi seguidos de Micic y Milaknis y otro de Pangos, que había vuelto tras varios minutos fuera y una canasta de Brandon Davies abrían la brecha de nuevo (34-25, min. 15) obligando a un nuevo tiempo de Pesic.

Aunque Edwin Jackson y Sasha Vezenkov entraban en la rotación, nuevos errores en ataque y algunas lagunas defensivas provocaban la máxima ventaja local 44-21 (min. 20) y solo un triple de Ribas, hoy poco acertado al igual que Heurtel frenaba la racha lituano al descanso (44-34, min. 20).

El Zalgiris había lanzado 33 tiros y el Barcelona solo 20, hacía cedido siete rebotes ofensivos por uno solo de los azulgrana, que habían perdido ya 11 balones. Las cosas se ponían peor al inicio del tercer cuarto merced a Toupane y Ulanovas (51-36, min. 12). El Barcelona subió sus líneas de defensa y cinco puntos seguidos de Tomic y un triple de Oriola metía de nuevo a los azulgrana en el partido (53-44, min. 24).

Moerman y Hanga, lesionados

Jasikevicius volvió a parar el partido, Tomic cometía la tercera faltas y sin Moerman, que sufrió un fuerte golpe en la cabeza, ni Hanga, que se retiró cojeando, ambos en el segundo cuarto y ya no volverían a jugar, entraba Claver, pero el Zalgiris daba una nueva vuelta de tuerca con un parcial de 10-0 (63-44, min. 27) después de otro tiempo muerto del Barcelona.

Tras casi cinco minutos en blanco era Juan Carlos Navarro el que, con cuatro puntos seguidos, sacaba a su equipo del delicado momento (63-48, min. 28), pero los lituanos volvían a la carga, Pangos dejaba el marcador en 70-50 y se llegaba al último cuarto con estos veinte puntos de diferencia.

La defensa ordenada por Jasikevicius era asfixiante, Ribas relevaba a un descentrado Heurtel (2 puntos, 9 asistencias pero 6 pérdidas) y, a pesar de algunas acciones de Oriola, los lituanos mantenían su ventaja (81-61, min. 36). Dos canastas seguidas de Tomic (81-65) desataba el enfado de Jasikevicius que pedía tiempo y abroncaba de nuevo a sus jugadores, que volvían lanzados y cinco puntos seguidos del francés Axel Toupane daban una nueva máxima ventaja a los locales (86-65, min. 37).

Tomic cometía la quinta falta, el Zalgiris jugaba ya con hombres poco habituales y la sangría azulgrana se cerraba con un triple de Oriola, hoy su mejor hombre (90-74).