Unicaja alegra la fiesta de Plaza y vuelve a ganar al Maccabi

Unicaja derrotó por cuarta vez consecutiva al prestigioso Maccabi de Tel Aviv tras un gran segundo tiempo donde fue superior. Joan Plaza celebró con un triunfo de categoría su partido número 302 en el banquillo del Carpena, superando el registro de otro gran entrenador, Sergio Scariolo.

Maccabi comenzó mandando (2-9 min 3) ayudado por tres pérdidas en ataque de Unicaja que serenó su juego y gracias a tres triples de Nedovic, Brooks y Salin, que había salido en lugar del mencionado Nedovic igualó (13-13 min 5). Su primera ventaja llegó a los siete minutos (17-15). Tras un tiempo muerto pedido por Spaliha se llegó al final del primer cuarto con 23-19.

Los verdes empezaron el segundo cuarto con las mismas pérdidas que en tramo anterior (25-30 min. 13). Parcial de 2-11 desasosegador. Oportuno triple de Carlos Suárez (30-32 min 14). Unicaja estaba impreciso y con errores en ataque que daban como resultados contragolpes con mayoría de los hebreos. Con parcial de 7-15 (min 15) Plaza pidió tiempo con un 30-34 y cinco pérdidas. Por fortuna el Maccabi no andaba fino con los triples (2/8). Dos fogonazos de McCallum pusieron el 34-34 Las pérdidas y los malos tiros eran un valle de lágrimas (36-41) rápidamente aniquilado con un 6-0 centelleante con un McCallum en estado de gracia. Con este 42-41 se llegó al descanso de un partido irregular y zigzagueante. Pero se veía que Unicaja iba a más.

El tercer cuarto empezó con más perdidas de Unicaja y parcial de 0-4 (42-45 min.22) que devuelven los locales. Pero el equipo creció de manera espectacular a partir de dos hechos puntuales, una técnica para Pierre Jackson. Y un tapón fabuloso de Nedovic a Parakhouski continuado con un formidable triple desde ocho metros de la estrella del equipo. El entrenador macabeo se ve obligado a pedir tiempo porque el parcial de 7-4 abría la brecha hasta un 49-45 (min. 24). Nedovic aparece a cuentagotas, pero cuando lo hace contagia a sus compañeros y a la grada. Cinco puntos de Milosavljevic y 54-45. Parcial de 12-0. Ahí se rompió el partido. Augustine era el dueño y señor de los tableros, siete rebotes en este tramo. (58-49 min 27). El Maccabi, arropado por 100 aficionados, no daba su brazo a torcer. Su defensa ganaba en agresividad, pero el triple se le resistía (3/16). Tampoco es que Unicaja fuera una maravilla (6/16). En el último suspiro del cuarto Dibartolomeo colocó un inoportuno triple (4/17). Se llegó al minuto 30 con un emocionante 60-55.

Para afrontar la recta final, Unicaja necesitaba calma. Nedovic se vino arriba y McCallum regresó igual de enchufado. Acabó con 14 puntos y 18 de valoración. El partido más completo de este irregular y eléctrico jugador desde que está en Málaga. Unicaja alcanzó su primera máxima diferencia (67-57) a falta de siete minutos. McCallum le metió otro tapón catedralicio que volvió a padecer el sufrido Parakhouski. Y se pitó una antideportiva a Pierre Jackson por una falta excesiva sobre Nedovic. Se fue al vestuario.

A falta de seis minutos, Unicaja gobernaba por 71-60. Cuando parecía que el Maccabi quería acercarse, el dueto Nedovic-McCallum mantenía las distancias en el electrónico (78-66 min 36). Nedovic se retiró con el gemelo dolorido. Nada alarmante. A falta de dos minutos el marcador ya estaba en 80-69. El 82-69 a falta de 40 segundos dictó sentencia. Unicaja derrotó por cuarta vez consecutiva al ilustre Maccabi, se acerca al octavo puesto da lustre al gran récord de Joan Plaza y alegra la vida a la gran afición del Martín Carpena. El duelo se clausuró con la máxima ventaja malagueña, 83-69. Unicaja está a dos victorias del soñado octavo puesto que, precisamente, sostiene el Maccabi.