Esta semana puede depararnos una doble y buena noticia en la NBA. La primera ya está confirmada por John Paxon, el vicepresidente ejecutivo de Chicago. Después de once meses de baja por la grave lesión que sufrió la pasada temporada en la rodilla izquierda, Zach LaVine debutará por fin esta temporada. Y lo hará vistiendo por primera vez la camiseta de su nuevo equipo, unos Bulls a los que aterrizó como moneda de cambio en el traspaso de Jimmy Butler del pasado verano. 

El ex de los Timberwolves y dos veces campeón del concurso de mates (2015 y 2016) se estrenará en la madrugada del sábado al domingo (a las 2:00, hora española) ante los Pistons, precisamente el equipo ante el que cayó lesionado a comienzos de febrero de 2017. Como ocurre en este tipo de casos, el escolta volverá a la acción de manera progresiva, con limitación de minutos y sin disputar back to backs.

Markelle Fultz

Los Sixers solo disputarán un único partido esta semana. Será el que les enfrente en el 02 de Londres a los Celtics. Un partidazo, el único oficial de la NBA que presenciaremos esta campaña en Europa, que podría traer consigo una novedad muy esperada: el regreso de Markelle Fultz. Unos problemas el hombro derecho lastraron su debut, que se redujo a apenas cuatro partidos al inicio de la campaña. Desde entonces, no le hemos vuelto a ver. El progreso de las últimas semanas (ya ha entrenado en cinco para cinco con el equipo) y la sorpresa que prometió este martes para la capital británica —pese a la insistencia de su compañero Embiid no la quiso desvelar— han desatado todas las expectativas: ¿volveremos a ver último número 1 del draft este jueves? Parece ser que sí...