El Barcelona no levanta cabeza. Después de un prometedor inicio de temporada, se ha metido en un profundo pozo con cinco derrotas seguidas, dos en ACB ante rivales en teoría inferiores (Estudiantes y Murcia) y tres en la Euroliga, que le han puesto en una situación ya delicada después de solo cuatro jornadas de competición. Y asoma el Olympiacos, que visita el Palau el viernes. Ocasión para redimirse o día para verse en una situación tempranamente crítica en Europa, donde el equipo ya se quedó fuera del playoff de cuartos la temporada pasada.

Sito Alonso, después de la sorprendente derrota en el Palau ante el Murcia, envió un mensaje muy serio: “Quiero hacer una reflexión después de esta semana. Cinco derrota seguidas no son nada positivas. Es obvio que estamos preocupados por el cambio radical en apenas unos días, muy preocupados. Algo menos por la reacción del final, porque eso es lo que buscamos en el equipo: no dejar de luchar, pelear cada rebote… pero hoy durante 30 minutos no lo hemos hechos. Así que no estoy satisfecho. Necesitamos sacar carácter en algunos jugadores. Durante 35 minutos no hemos visto al equipo que quiero ver. Es responsabilidad mía”.

Sin embargo, el técnico azulgrana no cree que el problema del equipo sea de actitud: “Jugar tres partidos en tan pocos días no es sencillo, a veces los jugadores se ponen una presión extra. No creo que haya un problema de actitud, a veces el rival ha sido superior y a veces ha faltado mentalidad y hemos dejado escapar algunas buenas rentas. En defensa a veces esperamos a ver qué hace el rival, y eso es un error. Nunca había perdido tantos partidos seguidos, ni en otros equipos a los que he entrenado. Tenemos que ser más duros, la exigencia en cada posesión será total”.

Por último, ha defendido al base estadounidense Phil Pressey, uno de los más criticados por la afición: “Ha dado una lección de lo que buscamos en un base: agresivo, intenso… Le hemos fichado para defender, no para anotar. Su juego no es meter o fallar. Su cualidad fundamental es la defensa, ser agresivo… Contra el Panathinaikos la victoria comenzó en él. Quizá tenemos que presionar más, jugar a lo que él quiere. Es el perfil contrario a Rice, es lo que quiero”.