La Selección pasa impoluta a octavos tras ganar a Croacia

Con sendos triunfos en los dos primeros encuentros del Europeo, la Selección española llegaba a la última cita de la fase de grupos sabedora de que una nueva victoria supondría su clasificación para los cuartos de final como primera de grupo. Un objetivo que no iba a ser ni mucho menos sencillo ya que las jugadoras de Madelen Urieta se iban a medir a una Croacia herida en su orgullo al no haber podido sumar en positivo en los dos choques precedentes.

De este modo, el rival de la Selección saltó a pista realmente motivado para anotarse los primeros puntos de un encuentro en el que necesitaron de apenas un par de minutos para colo adueñarse del electrónico (0-6). Eso sí, su superioridad inicial no iba más allá del electrónico ya que, sobre la pista, las jugadoras españolas tiraban de sacrificio defensivo para cerrar muy bien el rebote bajo el aro propio y poder correr la pista. Así llegaron los primeros puntos a cargo de una Iris Junio que homenajea en este campeonato a su madre -la mítica Mbulito- luciendo su apellido sobre el dorsal para impulsar a un equipo que parecía sentirse de nuevo muy cómodo. Dos buenas acciones consecutivas de Pendande, una desde la media distancia y otra bajo aro tras pase de fantasía de Serrat (12-10). Alba Prieto se sumaba al acierto nacional con un certero triple y España alcanzaba su máxima (+6) pero sin perder de vista por el retrovisor a una Croacia que no perdía el pulso al encuentro pese a la remontada nacional (18-14).

Le había funcionado a España el poder crecer desde la defensa y fue por ello que el equipo dio comienzo al segundo periodo subiendo la intensidad con una especial atención a las líneas de pase. Un trabajo que dio sus frutos ya que el equipo logró mantener su aro a cero durante casi tres minutos ante una Croacia que apretaba también bajo su propio aro. Eso sí, a base de correr y correr, España logró una renta máxima hasta ese momento de siete puntos con la que forzar el primer tiempo muerto de su rival (26-19). Con viento de cola, España siguió creciendo gracias a la aportación de una Iris Junio capaz de anotar y volver a robar el balón en la transición defensiva para forzar la antideportiva de su rival. España se sentía cómoda y el marcador reflejaba por primera vez unas diferencias superiores a la decena (33-21). Y no se conformó sólo con eso el equipo español ya que el triple final de Lucía Rodríguez supuso el mejor colofón a un cuarto en el que un nuevo parcial de 9-2 colocaba a España veinte puntos por delante (43-23).

Tal y como era de esperar, Croacia trató de imprimir una nueva marcha al encuentro tras el paso por los vestuarios. Conscientes de la importante desventaja en su contra y de la premura del reloj que acompaña al electrónico, las serbias buscaron posesiones cortas ante una España que seguía trabajando duro en defensa y que hacía del rebote defensivo uno de sus puntos fuertes para poder mantener intactas las diferencias (54-43). Poco varió el guion a lo largo de un tercer cuarto en el que fue precisamente la constancia nacional la encargada de neutralizar los mejores momentos de una Croacia que trataba de explotar una defensa en zona que no fue un impedimento para que España siguiera coqueteando con el aro (63-46).

No bajo los brazos la selección de Serbia y a base de pico y pala las diferencias se vieron ligeramente reducidas a lo largo de un último periodo en el que España movió su banquillo y en el que Madelen Urieta siguió probando diferentes aspectos del juego de cara a unas eliminatorias por las medallas que darán comienzo el próximo miércoles y a las que España llegará como líder del Grupo A (74-65). En octavos, se enfrentará a Turquía (15:45).