Laia Palau supera a Amaya: "Quiero vivir mi último verano como si fuera uno más"
La base jugará este lunes ante la República Checa (18:00, Teledeporte) su partido número 259 con la Selección. Uno más que Amaya Valdemoro.
Laia Palau (Barcelona, 10/09/79) disputará hoy (18:30, Teledeporte) ante la República Checa su partido 259 con la Selección y se convertirá en la jugadora que más encuentros suma con España. La líder del vestuario dirá adiós tras el Eurobasket: ha ganado nueve medallas y quiere despedirse en la República Checa con la décima.
Pensaba retirarse de la Selección tras los Juegos, ¿qué le hizo cambiar de opinión?
¡Quién se va a cansar de vivir esto! Vives una experiencia tan maravillosa, te encuentras con un grupo de gente así… No tengo ninguna queja. ¿Por qué sigo? Porque aquí me río, nos juntamos todas, hacemos el baloncesto que nos gusta. En definitiva, estamos cómodas.
Leti Romero comentaba que nadie se imagina lo que va a perder España en el vestuario.
Me emociona oír esas cosas. Lo bueno de esta selección es que es un equipo y espero que la dinámica haya germinado lo suficiente. Que se entienda que hay una manera de trabajar, que da resultado y en la que encajamos. No es algo que me haya inventado yo, sino algo que ha surgido entre todas. Deben hacer lo posible para que perdure.
¿A quién nombraría nueva líder del vestuario?
Creo que va a ser un triunvirato. Hay una líder dentro de la pista que es Torrens. Eso es innegable. Y debe existir alguien que se preocupe por el grupo. En este caso yo creo que será Silvia (Domínguez), porque tiene la experiencia necesaria: lo ha demostrado en Salamanca. Pero no sólo ella. Me gustaría que Cruz, Pascua, Xargay... que todas ayuden.
¿Cómo afronta su último campeonato con España?
Me he ido despidiendo de la Final Four, de las competiciones europeas... No quiero pensarlo más. Quiero vivir este verano como uno más. Es la mejor manera de encarar las cosas.
¿Cómo se imagina la noche del 24 de junio?
Espero que algo nerviosa porque voy a jugar una final. La gente se viene muy arriba con nosotras y habla siempre de oro. ¡Si hemos ganado sólo uno! No es tan fácil.
Pero sí son la selección que más medallas europeas ha conseguido en el siglo XXI.
Eso es lo que a mí me llena de orgullo. Llevamos muchos años arriba y uno más hay que estarlo. Me da igual de qué color sea la medalla, pero si puede brillar un poquito más… Lo que tenemos que tener en la cabeza es que nuestro nivel es X y de ese nivel no podemos bajar. Si lo alcanzamos, vamos a estar en el podio.
Con Mondelo van cuatro medallas seguidas, ¿qué ha aportado él a esta Selección?
La impronta del entrenador es algo importante y no se le puede negar que sabe lo que hace. Pero hay más cosas. La llegada de Sancho nos ha permitido aspirar a más, aunque también es verdad que sin ella en Río conseguimos lo que conseguimos. Otro punto muy importante es que ha coincidido una generación de oro y la FEB lo ha hecho muy bien. El país es sano a nivel de baloncesto y se trabaja bien.
El Europeo es exprés. ¿Eso les favorece, les perjudica...?
No lo sé. De eso ya se ha preocupado Lucas... Nosotras tenemos una ventaja: sabemos competir. Si es rápido, rápido; si es con más descanso, con más descanso. La clave es estar preparadas mentalmente, como nos pasó en los Juegos.
Ha pasado los últimos cuatro años en Praga. ¿Es especial que sea en la República Checa y que cumpla su internacionalidad 259 ante ellas?
Mucho. De hecho era parte de mi plan. Praga ha supuesto la oportunidad de acabar mi carrera disfrutando del baloncesto, con minutos… Para mí es un campeonato muy especial. A lo mejor mi decisión de aguantar un año más es también por eso.