El Tenerife sigue de fiesta y aleja al irregular Bilbao del playoff
Un 0-11 en el tramo final (a falta de 27 segundos) puso la incertidumbre: 78-76, pero decidió San Miguel con dos tiros libres. Los insulares siguen con opciones de la cuarta plaza.
La resaca sienta bien al Tenerife, que se ha metido cuatro partidos en un par de semanas y está como nuevo. El jueves le faltó un pelo para sorprender al Baskonia y hoy ha despachado al Bilbao sin gran temblor. Bueno sí, un poco al final, cuando de forma agónica el equipo vizcaíno metió un 0-11 y se plantó a falta de 27,2 con dos puntos abajo (78-76). Dejó entonces agotar posesión al cuadro insular hasta que el balón llegará a las manos de San Miguel, el que podía conceder algo en los tiros libres. Fue cuando quedaban 12 segundos. Pero el doble cero embocó los dos lanzamientos y zanjó la cuestión. El campeón de la Champions aún cree en la cuarta plaza, aunque para eso tiene que seguir prestando favores el Barcelona, y al RETAbet se le pone en chino: ha de ganar los dos partidos que restan y que el Andorra, que suma y sigue en casa en esta ocasión ante el Valencia, lo pierda todo.
El partido discurrió parejo y cuando exigía un punto más, el Tenerife se mantuvo en pie y al Bilbao le faltó cuajo. Está siendo una temporada con mucho sudor para ambos (por la competición europea en los locales y la plaga de problemas físicos en los visitantes). Duran, pícaro él, apuntó en la previa que Borg es baja para lo que resta de curso pero lo puso en marcha. Los 18 puntos de Tabu (23 de valoración) esta vez no fueron el bálsamo para encarrilar un triunfo necesario.
Fue una travesía irregular, como si ya estuviéramos en el playoff, con el Bilbao a la chepa del Tenerife, cuya gasolina ofensiva la aportaba Doornekamp, crucial en los triples con Kirksay, ya que el RETAbet no les llegaba a las esquinas. Los detalles, como las pérdidas, decantaron la balanza. Lapornik dio frescura saliendo del banquillo y el equipo se agarró al último clavo ardiendo justo cuando todo parecía perdido. Pero la justicia extendió su dedo para la isla. Al Iberostar le faltó chispa, fluidez ofensiva y quizás un punto más de intensidad atrás, lo que permitió a los vizcaínos estar siempre en el partido, pero ya se sabe que de fe va sobrado.
El conjunto local logró tomar un pequeño respiro en el segundo cuarto (24-16), su máxima diferencia hasta el momento, pero de nuevo el Bilbao lograría meterse en el choque con un buen Tabu y los acertados Lapornik y Buva. A la vuelta de vestuarios, Mumbrú se permitió el lujo de alcanzar la máxima ventaja (31-36). Con el encuentro de este domingo ante Iberostar Tenerife el capitán de los 'hombres de negro' ha llegado a los 641 en la Liga Endesa, cifra con la que iguala a Carlos Jiménez en la séptima posición histórica; persigue ahora a Herreros (654). El equipo tinerfeño lo intentó buscando el juego interior y Bogris aprovechó sus ocasiones para anotar. Cuatro puntos consecutivos del griego, ex de Bilbao, pusieron a los locales en la pista del triunfo, con la continuidad de Doornekamp, que con dos triples, igualó el marcador (44-44). Kirksay completó el bombardeo desde la lejanía.
El último cuarto abrigó un dominio claro del Iberostar. Los laguneros supieron aprovechar varios errores visitantes para alcanzar la ventaja más importante del choque (70-59), una diferencia que lograron mantener hasta el último minuto ante un RETAbet Bilbao que nunca bajó los brazos y arriesgó, pese a tener el partido casi perdido (78-68, min.39). El arreón final fue el canto del cisne.