El UCAM tumba a Andorra en una gran primera parte
El Murcia consiguió una victoria importante en la carrera por la salvación. Campazzo anotó 10 de sus 15 puntos en el primer cuarto.
El UCAM Murcia consiguió una importante victoria por 77-53 ante Andorra en su carrera por la salvación, que queda ya a dos victorias, mientras que aleja a los de Peñarroya de esa pelea por meterse en el playoff. Un duelo que se decantó en favor de los de Fotis Katsikaris en una primera parte donde los locales se impusieron tanto en ataque como en defensa para llevar la ventaja a más de veinte puntos dejando el encuentro muy encarrilado.
El UCAM Murcia salió lanzado sobre el parquet del Palacio de Deportes. Guiados por un magnífico Campazzo (diez puntos en el primer cuarto), los de Katsikaris arrancaron con un parcial de 19-2 que obligó a Joan Peñarroya a frenar el partido. Tras el tiempo muerto Andorra se mostró más intenso y acortó distancias y se llegó a poner doce abajo (nunca superó la barrera de los diez). Una canasta espectacular de Radovic al poste cerró el primer parcial en 24-10 para un UCAM que se mostraba dominante en las dos zonas.
En el segundo parcial no aflojó el UCAM, que siguió apretando en defensa y anotando con fluidez. Delía secó a Shermadini y encima anotaba para poner 20 arriba a los murcianos. Peñarroya no sabía como frenar la sangría ofensiva y defensiva (solo anotaron 24 puntos en la primera mitad). Al descanso los de Katsikaris vencían por 44-24.
En la segunda parte los de Peñarroya se entonaron en defensa y el UCAM ya no anotaba con tanta fluidez. Una bandeja de Schreiner obligó a parar el partido a Fotis Katsikaris, pues Andorra se acercó a 16 puntos, pero sobre todo las sensaciones de su equipo en ataque no eran buenas Andorra pasó a defender en zona, pero Murcia conseguía anotar gracias al triple de Benite y una canasta de Radovic manteniendo así la ventaja por encima de los quince puntos, marchándose al último cuarto dominando por 57-41. Tras intercambio de canastas inicial, un triple de Pocius y un mate de Tumba pusieron otra vez la ventaja local por encima de los 20. Shermadini intentaba echarse el equipo a las espaldas ante la ausencia en la anotación de hombres como Albicy o David Navarro... pero parecía insuficiente para acortar esa desventaja. Al final el 77-53 definitivo reflejó la superioridad del UCAM sobre todo en defensa, donde hicieron la vida imposible a los de Peñarroya.