MINNESOTA TIMBERWOLVES 119-HOUSTON ROCKETS 105
Ricky Rubio repite hazaña: 17 asistencias, récord en Minnesota Timberwolves
El internacional español alcanza la marca más alta de la franquicia en un partido por quinta vez en su carrera. Los Wolves acaban con una racha de nueve victorias seguidas de Harden y Houston Rockets. España-Eslovenia: Semifinales Eurobasket
No había partido mejor, ni mejor momento para que Ricky Rubio diera una muestra de lo que puede hacer sobre una cancha de baloncesto. Llegaban los supersónicos Houston Rockets a Minnesota después de enlazar nueve triunfos seguidos y con James Harden en modo trituradora: 80 puntos, 25 rebotes, 20 asistencias en los dos últimos partidos, cinco triples-dobles en los siete previos a este y 32,4 tantos, 9,9 capturas y 11,4 pases de canasta de media totalmente loca. Un problema para estos Wolves que aprovecharon el orgullo de Karl-Anthony Towns (23 puntos y 18 rebotes) y Andrew Wiggins (28) para hacer claudicar a la franquicia texana (119-105). Con este triunfo, los Wolves consiguen encadenar por segunda vez este curso dos victorias seguidas. La última vez fue a mediados de diciembre ante Phoenix Suns y Atlanta Hawks. Muy poco para un proyecto que ilusionaba a principios de temporada, pero que solamente suma 13 triunfos, con este, en 39 encuentros. Un 20%. Muy pobre.
Sin Zach LaVine, baja por una contusión en la cadera, Minnesota aguantó las embestidas de los Rockets en la primera parte. A pesar de que el 55-54 al descanso no auguraba nada bueno para Thibs y sus chicos, estos no bajaron la guardia. Rubio dio un recital en el pase para llegar a las 17 asistencias, máxima de la temporada, al final de su partido 292 con los Wolves, superando a Sam Mitchell en el cuarto lugar histórico de la franquicia. Es la quinta vez en su carrera, toda ella en Minneapolis, que llega a esa cifra en el pase, el récord en un encuentro en Minnesota. Un día más en la oficina para el base que añadió 10 puntos y 3 rebotes.
Esta aportación aleja un poco, al menos por el momento, el fantasma de Kris Dunn, que desde sus 11 tantos ante Portland Trail Blazers ha vuelto a su habitual irregularidad: en los últimos cinco duelos no se ha acerado a los 10 puntos, con dos roscos incluidos frente a Sixers y Wizards. Un respiro para el español que sigue por debajo del 40% en el tiro esta temporada. En realidad, desde que debutó en la NBA, nunca ha superado esa barrera con un promedio de 36,9% en cinco campañas y media.
La vuelta de los vestuarios dotó de cierto aire inspirador a Minnesota. Sobre todo, tras un triple de Ryan Anderson (68-69) que provocó un parcial 17-4 coronado con un mate de Towns (89-77). El pívot obtuvo su 29º doble-doble de la temporada. Es el tercero en el ránking de la Liga. El inicio del último periodo fue una lápida para los Rockets. Los Timberwolves anotaron ocho canastas seguidas (97-77) para colocar el encuentro lejos del alcance de un Harden que a pesar de su poca inspiración desde el triple (2/11) llegó hasta los 33 puntos y las 12 asistencias. De nada sirvieron. Minnesota sonríe un día, al menos un día dentro de una campaña aciaga.