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GRAN CANARIA 82 - BETIS 62

No hay quien pare a este Herbalife Gran Canaria

El equipo insular sumó su tercer triunfo seguido en ACB tras empezar 0-4 en la Liga. El Betis cometió demasiados errores: 23 pérdidas en total.

Hendrix y Salin.
Hendrix y Salin.Miguel Henriquez

El engañoso 0-4 con el que el Granca empezó a liga comienza a ser un simple mal recuerdo. Así, el equipo de Luis Casimiro ha encadenado tres victorias consecutivas en ACB ante Fuenlabrada, Murcia y Betis con otras tantas palizas. Con aires de superioridad. Como un equipo grande. El equipo sevillano aguantó lo que pudo, un cuarto, y en la segunda parte se dejó ir. Ni pudo ni le dejó el Herbalife, lanzado como un cohete al que no hay quien pare.

Dormidos como estaban ambos equipos, la empanada con la que comenzaron el partido era digna del mejor bocado gourmet. Así, cuando ya se habían superado los 3 minutos de partidos, el marcador registraba un famélico 2-2. Salin descerrajó un triple para el 5-3 y enaltecer ánimos, contestado acto seguido, desde idéntica distancia, por Radicevic. Al tostón inicial contribuyeron unos árbitros en exceso protagonistas, desquiciando a unos y a otros, amarillos y verdiblancos, por supuesto a la grada del coloso Gran Canaria Arena.

Un triple de Aguilar tras asistencia de Kuric, que supuso el 12-10, le dio al Granca una ventaja que no volvió a soltar jamás, acaso firmando la crónica de la anunciada muerte de su rival. Kuric y Rabaseda se sumaron a la fiesta del triple para aventajar a los locales con el considerable 17-10, y un canastón final de Keny Cherry con la bocina del primer cuarto sonando mantenía al Betis en el partido, 22-19. El base americano acabó el primer cuarto con 11 créditos de valoración.

Rabaseda parecía multiplicarse, tan imparable como se sentía, y reventó el aro en contrataque para inaugurar el segundo parcial, 24-19. Lejos de ser una jugada más, esta deliciosa acción del alero catalán le quitó las bridas a su equipo, si es que las tenía, y supuso el inicio del camino del tractor amarillo. Tenía el Herbalife respuestas para todo, y si Nachbar acercaba a los suyos, 26-22, Oliver contestaba de 3 (29-22). La renta crecía y una canasta Kuric la daba al Granca un +11, 33-22, que solo pudo Marc García, acabando además con un parcial de 7-0.

Lockett marcaba músculo con uno de los mates de la temporada, 38-29, pero el Betis ya había entrado en bajada. O´Neale entró al trapo de Lockett y se vino arriba, siendo decisivo para que la renta insular creciera y creciera hasta el 51-35 tras los primeros 20 minutos. En un estupendo trabajo coral, anotaron todos los jugadores del Gran Canaria a excepción del lesionado Planinic, que vio el partido desde el banquillo vestido de calle.

Tostón

Los primeros minutos del tercer cuarto fueron un auténtico tostón. Así, cuando ya se habían celebrado los cinco iniciales, el marcador registraba un paupérrimo 53-41 que solo favorecía al Granca, que apenas tenía que hacer nada para conservar su ventaja, que solo podía crecer como cuando un triple de Oliver le daba de nuevo el +16, 60-44. El Real Betis no era capaz de dar el zarpazo necesario para una remontada de la que no hubo ni siquiera conato. Todo estaba hecho para el Herbalife, que solo debía esperar paciente a que se consumiera el partido sin tener que hacer grandes esfuerzos.

Para salir del tedio, llegó a resultar conmovedor el esfuerzo de Rabaseda y Aguilar en ambas canastas, tapones de lujo incluidos, por mantener vivo un partido que veía una espantosa actuación de Nachbar y Zoric, dos de los pilares visitantes. Los locales se gustaban, y fue Kuric el encargado de superar los 20 puntos de ventaja, 72-51. Ya con la intensidad propia de un amistoso, el marcador final, 82-62, no varió en exceso la diferencia real entre ambos equipos.

Al Herbalife le espera ahora un maratón viajero que incluye paradas en Macedonia, Santiago de Compostela y Lituania sin pasar por casa. Y luego son otros los que se quejan de viajes incómodos…