Paliza descomunal (+54) del Barcelona a un triste Sevilla
El equipo azulgrana ya ganaba por 50 al final del tercer cuarto y alcanzó el +56. Rozó la mayor paliza de la historia en la era ACB (+59). Excelente regreso de Arroyo.
Cuando se enfrentan la mejor defensa de la Liga y la peor, el cuarto ataque y el antepenúltimo y lo hacen en la pista del segundo clasificado y el decimoquinto, el resultado es el que hoy se ha visto: 108-54 en el encuentro entre el Barcelona Lassa y el Baloncesto Sevilla.
Carlos Arroyo reapareció a lo grande. Poco pudieron hacer los jóvenes Hakanson y Miljenovic para pararle, y el portorriqueño sumo 10 puntos y 9 asistencias en 18 minutos en pista. Y Tomic se contagió sumando 11 puntos y 10 rebotes en 15 minutos en pista. Esperemos que no haya sido algo aislado. Los 54 puntos de diferencia es la segunda mayor lograda por el Barcelona en la liga ACB. Lá máxima es de 59 ante el Valladolid (109-50), el 15 de diciembre de 2013.
Con Navarro descansando y Lawal lesionado, con la rotura del menisco de su rodilla derecha en el partido ante el Zalgiris, el Barcelona jugó el primer cuarto lanzado en todas sus líneas, incluso con Doellman casi inédito al cometer tres personales en los tres primeros minutos pero con Tomic siendo el de siempre con seis puntos en seis minutos. Así poco puede hacer ningún rival ante la férrea defensa azulgrana.
El 27-12 en esos primeros diez minutos, con solo tres canastas en juego del equipo de Luis Casimiro, ya lo deja todo claro y más si Carlos Arroyo, que entró a dos minutos para el final de ese periodo inicial, demuestra que, tras dos meses de baja por lesión, no ha perdido su instinto asesino.
El segundo cuarto sería más igualado con un parcial de 30-21, pero el tiro exterior azulgrana (6 de 8 en triples) pulverizó la defensa zonal sevillista para llegar aun rotundo 57-31 (m.20) tras el segundo triple de Satoransky. La respuesta visitante llegaba por medio de tiros libres (8 de 10) y con incursiones interiores de Bamforth y Balvin, pero sin inquietar nunca y, además con un sólo triple en todo el segundo parcial.
Tras el 57-33 al descanso siguió el festival azulgrana con Satoransky enchufado y Tomic aprovechando minutos. La ventaja local llegaba a los 30 puntos (67-37, m.25) y Pascual ordenaba más presión en defensa. Un triple de Perperoglou hacia que la diferencia superara los 40 puntos (79-38, m.29) y Carlos Arroyo, en un retorno espectacular, establecía en 50 puntos al final del cuarto (91-41).
En los primeros cinco minutos del último cuarto, la exhibición azulgrana llegaba al máximo. Por dos veces se alcanzaron los 56 puntos de diferencia (97-41 y 104-48) y se pensó en el récord del +59. A partir de ahí los catalanes bajaron el ritmo, tras lograr un increíble 65 por ciento en triples (15 de 23) y el choque se estabilizó hasta el 108-54 final.