El líder Valencia se pasea ante un nefasto Dominion Bilbao

"¡Sito, que esto es un partido ACB, no de Minicopa!", gritó un aficionado del Valencia, haciendo mofa del lamentable partido que estaba cuajando Bilbao en La Fonteta. Para entonces el marcador era de 39-10, con casi 17 minutos de partido jugados. Sito miraba como queriendo encontrar un agujero para que se lo tragara la Tierra. Bilbao sencillamente no compareció al partido, como dando por imposible de entrada una victoria ante el líder Valencia que ya suma 18-0 en Liga Endesa. Además del triunfo, lo más importante fue que cogió confianza de cara a la primera 'final' del curso que será ante el PAOK en Salónica, el miércoles.

Valencia demostró pronto que la doble derrota ante el Limoges estaba más que olvidada. Los taronjas se parecieron más al equipo que doblegó al Barça en el Palau. Los primeros parciales fueron demoledores para Bilbao, al que además de comprobar que Valencia era un rodillo en ataque, sus tiros no le entraban. Un triple de Lucic puso el 11-2. Sito Alonso lo paró. Movió el árbol poniendo a Hervelle de 5 y Mumbrú de 4. Tampoco le funcionó el 'small ball'. Un triple de Bertans pareció cortar la sangría (18-8). Pero de ahí al final del primer cuarto sólo anotó Dubljevic (8 puntos seguidos) y Hanna, en dos tiros libres que le 'regaló' Diot y que enfadaron mucho a Pedro Martínez. Ese es el nivel de exigencia del técnico taronja. Da igual perdiendo de 10 que ganando de 20. Los porcentajes de los vascos en el primer cuarto, demoledores: 1 de 8 en tiros de dos; y 2 de 7, en triples. Sería la tónica del resto del partido.

La lógica decía que Dominion Bilbao había tocado fondo. Pero aún le faltaban metros por caer. En una serie de tiro aún más lamentable que la anterior, estuvieron sin meter una canasta más hasta que quedaban 3:20 para el descanso. A esta faceta negativa añadió las continuas pérdidas (8 en dos cuartos). Para entonces Valencia ya había castigado hasta el 39-10 y la canasta de Bogris (la primera en este cuarto) fue coreada con sorna con la afición de La Fonteta. Tan fácil lo vio el líder que empezó a fallar triples (4 de 13 en la primera mitad). Pero Mumbrú estaba empeñado en que el partido fuera un paseo en barca para Valencia. Difícil recordar una actuación peor de un jugador en un tiempo. Todo esto dejó un 43-18, al descanso. Ver para creer.

Tras el asueto, Bilbao tenía dos cuartos para, ya con el partido perdido, al menos enjuagar algo el ridículo espantoso que estaba haciendo en La Fonteta. Mejoró algo. Con eso y con que Valencia se relajó, al menos anotó los mismos puntos en el tercer cuarto (18) que en los dos anteriores juntos. Pero dos triples en los últimos segundos de Sato y Diot pusieron la máxima ventaja al final del tercer cuarto (66-36). El último cuarto sobró. Martínez dio descanso a sus puntales de cara al miércoles y Bilbao continuó con su penitencia, intentando maquillar lo que ya no tenía arreglo. Al final, 36 de ventaja.