HAPOEL JERUSALÉN 64 - GRAN CANARIA 75
El Granca se sobrepone a un pesado viaje y gana al Hapoel
El Herbalife suma su primera victoria de la segunda fase a costa del equipo de Jerusalén. Llegó a ir ganando 31-55 en el tercer cuarto. Salin, 6/9 en triples.
Si algo se le podía acusar al Herbalife esta temporada, era desde luego de su falta de regularidad de mental, perdiendo norte y brújula en demasiados partidos, con los sesos puestos en otra órbita. Esta noche, sin embargo, jugó con la moral del Hapoel para asestarle muy pronto una dentellada definitiva. Olió sangre y se lanzó al cuello rival para sentenciar el partido antes del descanso. Ni siquiera su relajación final permitió a los hebreos evitar la segunda y peligrosísima derrota en esta segunda fase de la Eurocopa.
Si la igualdad reinaba al final del primer cuarto (16-19), como correspondía a unos primeros diez minutos de reconocimiento del terreno, esta se evaporó demasiado pronto... Si Halperim encestaba de 3 para el 19-21, un soberbio Oliver (4/5 triples al descanso) respondía acto seguido desde lejos. Resulta que, cuando más falta hacía, mejor está rindiendo el base catalán, faro y timón ante la ausencia de Kevin Pangos, lo que significó que Paulí volviera a actuar, con ciertos destellos, como base ocasional.
Con idéntica suerte que el 4 amarillo golpearon Salin y Aguilar, poniendo este último el marcador en un clarificador 21-34. Omic ya se había sumado a la fiesta, y dos nuevos triples de los propios Aguilar y Oliver parecieron romper definitivamente el partido (26-42). Un enceste lejano de Gaffney, único jugador del Hapoel que daba la talla hasta entonces, con este periodo ya agonizando ya no hizo sino aguantar un marcador que al descanso amenazaba con paliza (29-46).
Maquillaje
La segunda parte supuso un curso acelerado de maquillaje para el Hapoel. El Herbalife llegó a ir ganando de 24 puntos, 31-55, y únicamente su relajación supuso algo de luz en el maltrecho Hapoel. La formación insular, además, percutió cuando más duele, con triples psicológicos cuando mejor se encontraba el rival, como los de Aguilar (49-66) y Salin (54-69).
El arreón final hebrero, tan relajado como estaba el Granca, le sirve para mantener la esperanza del average, que los amarillos deberían, tal y como fue el partido, tener más que resuelto con vistas a posibles empates finales. La odisea del viaje, que empezó el domingo tras ganarle al Joventut, tuvo final feliz para el Herbalife, que se redime en Europa tras el derrape ante el Estrasburgo. Dentro de siete días recibe al Saratov.