Valencia sigue de líder con un triunfo funcionarial ante UCAM

Valencia Basket igualó el mejor inicio de su historia en ACB (12-0) con una victoria funcionarial. Había que ganar y así lo hizo. Fue un día gris para los valencianos que sacaron adelante con un gran segundo cuarto y con más oficio que acierto. UCAM Murcia, muy inferior en cuanto a calidad y fondo de armario, plantó cara e incluso asustó por momentos al líder en el último cuarto. Pero al final, los taronjas amarraron la duodécima victoria del curso en Liga Endesa.

Valencia salió enchufado de la mano de Guillem Vives en la dirección. Con parciales de 8-0 y 12-5 el líder parecía con ganas de finiquitar el envite ante UCAM Murcia por la vía rápida. Pero esta vez las rotaciones de Pedro Martínez cortaron el ritmo a los locales. Salió Diot y perdió tres balones consecutivos que dieron alas a los murcianos. De la mano de Campazzo y bien escoltado por Rojas y Antelo, los universitarios fueron recortando hasta llevarse la primera manga por 15-16.

No está acostumbrado Valencia, esta temporada, a ir por debajo en el marcador. Por eso, salió en el segundo acto arrollador: infalible en ataque y ahogando al UCAM de tal manera, que el parcial inicial fue de 17-0. Cinco minutos sin anotar los visitantes mientras Vives, Sato, Dubljevic y Rafa Martínez acribillaban el aro universitario. Y además, dominando el rebote de manera insultante. A destacar San Emeterio que capturó 10 rechazos en sólo 12 minutos de juego, en la primera mitad. El partido ya estaba roto (32-16, min.15). Un arranque de orgullo visitante, con tres triples seguidos, dos de Kelati y uno de Antelo, le dieron algo de vida al Murcia, de cara a la segunda mitad del partido (38-29).

Pero si ganar a Valencia Basket este año es una empresa complicadísima, hacerlo con remontada ya parece una utopía. Los murcianos no se rindieron pero a golpe de triple los locales fueron matando las esperanzas universitarias en culminar una machada en La Fonteta. Además, capturar cada rebote era una quimera para UCAM. La jugada que ejemplificó esto fue la que puso a Valencia con la máxima ventaja (52-32). Hasta cinco acciones de tiro tuvieron los locales en una misma jugada. Sikma acabó palmeándola dentro. Ahí Valencia lo vio ganado y desconectó. Los visitantes lo aprovecharon para acabar 55-42, con un cuarto por jugar.

Y en el último cuarto, con un Valencia deshilvanado, Murcia rozó la proeza. Valencia no atacaba con fluidez y los murcianos iban recortando, punto a punto. Pero no llegó a creérselo. Llegó a ponerse a seis (57-51), con más de cuatro minutos por jugar. Además, el Murcia tenía posesión para acercarse aún más. Por primera vez en todo el año, se vieron caras de miedo en La Fonteta. Pero Cabezas perdió ese balón y le hizo una falta antideportiva a Vives. Rescató a Valencia cuando más negro lo veía. Los dos tiros libres de Vives y un triple de Dubljevic volvieron a poner las cosas en su sitio. Ahí sí que Murcia ya sacó bandera blanca.