Holanda vuelve a ganar en un Europeo 28 años más tarde

La primera sorpresa de este Eurobasket la firmó Holanda, que afrontó su debut como un acontecimiento histórico y no defraudó. Volvía a la cita continental 26 años después de su última participación, en 1989, y convirtió el partido en una fiesta con final feliz. Y emocionante: 72-73. El base Charlon Kloof fue la gran figura (buena mano, piernas potentes y 22 puntos), bien secundado por Worthy de Jong (16).

Después de contar con una renta de 12 tantos a 9:37 del final (48-60 tras canasta del pívot del CAI Henk Norel), Georgia reaccionó. Era lo lógico. Más talento y más experiencia. Así, entre Shenghelia, Pachulia (16 tantos cada uno) y Sanadze (11) completaron la remontada: 70-65 a 2:16 de la bocina. Georgia parecía despertar de un mal sueño, pero aún le quedaba lo peor. La fase aguda de la pesadilla. Esos últimos 136 segundos.

El marcador se estrechó tras tres tiros libres (70-68, uno de Norel y dos de Kloof), aunque el exazulgrana Pullen amagaba sentencia a falta de un minuto (72-68). No fue la puntilla porque Kloof anotó un triple a tabla increíble y luego Smeulders aprovechó una pérdida de Pachulia para embocar un lanzamiento de seis metros: 72-73. Resultado definitivo.

Ni Pullen ni Markoishvili acertaron a la desesperada con el tiro ganador. Algún aficionado holandés lloraba en la grada. Su país ha regresado a un Eurobasket 26 años después y además ha saboreado su primer triunfo en 28 años. El último había llegado en 1987 con Toon van Helfteren, actual seleccionador, vestido de corto: 207 veces internacional. Más que nadie. Ahora ha sido él uno de los artífices de una victoria que dejará huella. Un éxito que llega dos años y medio después de que la selección holandesa estuviera a punto de disolverse temporalmente. Historias del Eurobasket.