La trayectoria deportiva de Guillem Vives solo se pude definir como meteórica. El base del Valencia es otro de los grandes productos de la cantera del Joventut. Desde su debut con 19 años con la Penya su progresión no se ha detenido. Y ahora, con 22, se ha estrenado con la Selección. Suma y sigue. En 10 minutos frente a Bélgica anotó un punto y capturó un rebote. Había cumplido un sueño. “Mi etapa en el baloncesto está pasando muy rápido. No me imaginaba llegar hasta aquí”, reconoce el que será el tercer director de juego de España en este Eurobasket. Scariolo ya le bendijo el pasado lunes: “Ahora mismo la idea es llevar a Vives, nos encontramos muy cómodos con cómo ha trabajado”.

El barcelonés aterrizó en la concentración con ganas de aprender de los dos compañeros en su posición: Sergio Rodríguez y Llull. “Del Chaco cogería su magia y cómo ve el baloncesto y de Llull, su carácter competitivo. Siempre asume responsabilidades”, alaba un Vives cuyo deseo es claro: “Quiero estar muchos años aquí”.

No solo Vives jugó su primer encuentro con los mayores. Nikola Mirotic y Willy Hernángomez vistieron por primera vez la camiseta española. Pasado y presente del Real Madrid, ambos son el futuro del equipo nacional. “Este muy contento de todo lo que me está pasando. Es un premio al trabajó que he hecho, aunque sé que me queda aún mucho por mejorar, pero soy un jugador muy ambicioso”, admite un Willy que regresará la próxima temporada a su casa, el Real Madrid. El hispanomontenegrino, por su parte, es un rookie atípico que llega de la NBA para ser decisivo desde el principio y sabe qué tiene que hacer para lograrlo: “Trabajar duro”.