La gran duda en el seno del Real Madrid antes del segundo partido de la semifinal ante el Valencia Basket era conocer si Pablo Laso apostaba por jugar con seis interiores o bien incluir en la lista de doce al joven Luka Doncic como tercer base. Finalmente, el técnico vitoriano se decidió por el esloveno, dejando fuera a Ioannis Bourousis. El pívot griego sigue así sin disputar ni un solo minuto en lo que llevamos del playoff. De hecho, no juega desde el pasado 20 de mayo, cuando los blancos cayeron ante el Laboral Kutxa en Vitoria días después de conquistar la Novena Euroliga del club.

En el tramo final de la temporada, Bourousis ha quedado relegado al papel de sexto pívot, un rol que este mismo curso ya han desempañado Marcus Slaughter y Salah Mejri. Ha pasado de promediar 18 minutos la campaña pasada en la fase regular de la Liga Endesa a los 15 de la actual. Una diferencia que se hace aún más latente en la Euroliga, donde hace un año fue titular en los 29 partidos que disputó (jugando 21 minutos por encuentro) y en este lo ha sido en apenas 10 de 28 (con 11:50 minutos sobre el parqué).

Por su parte, y tras quedarse fuera en el primer partido de la serie ante los taronja el pasado jueves, Doncic volvió a entrar en la convocatoria aunque se quedó sin jugar. Con la baja de Facundo Campazzo, ejerció como el tercer base del equipo en cuartos ante el Herbalife Gran Canaria. El propio Laso reconoció esta misma semana que el flamante MVP del torneo junior de la Euroliga está capacitado para ejercer las funciones de director de juego.