OBRADOIRO 77 - 72 BILBAO

La magia del Fontes do Sar paraliza al Dominion Bilbao

El Bilbao tenía el partido ganado con 18 de ventaja pero se dejó comer el terreno en el último cuarto. Mala actuación de Marko Todorovic y Latavious.

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El Dominion Bilbao acariciaba la posibilidad de empatar con el Barça en la tercera plaza. Una locura en un club que estaba fuera de la ACB el verano pasado. Estaba jugando como los ángeles, aplastando a todo un Obradoiro, equipo muy espinoso en su pista. Y tanto, porque al calor del Multiusos Fontes do Sar ha sumado diez de los doce encuentros que tiene en el zurrón. Aquí han caído rivales de pedigrí como el Barcelona

Hasta Andjusic se sumó a la causa en un arranque fulgurante vizcaíno en la línea de tres, más Hervelle que parecía Nowitzki como cuatro abierto. En el segundo cuarto los ‘Hombres de Negro’ dejaron al Río Natura en nueve puntos y aunque los tiros de dos eran un tormento, Raúl López, habitual verdugo de los gallegos, dinamitó el encuentro. Sito Alonso enfocó la semana en frenar a Waczynski, pero el escolta polaco es un superclase y va para jugador en equipo grande. También quería parar la producción de Corbacho y éste corrió libre en la parte decisiva.

Moncho Fernández estaba desesperado y recibió una técnica. El Bilbao dominaba, pero algo no acababa de cuadrar. Tiraba de su talento individual y parecía ausente cerca del aro. Como el triplazo de Dairis Bertans en el último segundo del primer tiempo, después de serpentear a izquierda y derecha para cuadrarse y nada más cruzar la línea divisoria de ambos campos lanzar y embocar apoyándose con fortuna en tabla: 49-64. Pero no hubo ni un pase interior en condiciones, sólo se jugó por fuera y así es imposible ganar a nadie en la ACB. Marko Todorovic y Latavious empiezan a estar bajo sospecha. Son titanes en casa pero fuera bajan mucho sus prestaciones. Bien es cierto que, a la vista de su gran temporada, están pendientes de un jugoso futuro y la cabeza empieza a estar en otro lado, pero no se puede admitir la actitud del Fontes do Sar. El rebote fue obradorista en el momento decisivo.

Un diez a cero confirmó que el pescado no estaba vendido: 59-64 tras un triple de Corbacho, que no anotó ni una supercanasta en Miribilla y durante 34 minutos tampoco en Santiago. El Dominion Bilbao dejó de jugar. Una defensa 1-2-2 fue mal atacada, sin penetraciones ni balones interiores (ni uno en todo el partido). Sólo un triple sobre la bocina de Mumbrú, pleno de clase, y acciones notables de Bertans evitaron el naufragio prematuro. La presión a toda pista también escocía. El capitán barcelonés maniobró de cuatro, más dos bases, para mover mejor la bola. Luego llegó un 16-0 para asestar el golpe definitivo, más una antideportiva de Raúl López, pura impotencia, a Pozas con un manotazo cuando se le marchaba. Desde el 16-14 no se había dado una ventaja local, hasta el 71-70. Kleber también fue una gran vitamina. El Bilbao ganaba 59-70 a falta de cuatro minutos y encajó un irresponsable 18-2 para la derrota más hiriente. Está en crisis a domicilio, eso ya es innegable. Por primera vez suma dos derrotas seguidas en Liga. Sólo Miribilla le saca del letargo. Y fiarte sólo de tu casa es muy arriesgado.