JOVENTUT 82 - MANRESA 63
Hannah, pesadilla para el Manresa en el último cuarto
Un parcial de 29-15 del FIATC Joventut doblega al equipo de Pedro Martínez que perdió el control total del rebote ofensivo y falló en tiros libres.
El FIATC Joventut ha puesto final de una serie de cuatro derrotas consecutivas para reforzar sus opciones al playoff por el título al vencer esta tarde a La Bruixa d'Or Manresa por 82-63 tras un choque en el que los manresanos se vinieron abajo en el último cuarto con un parcial de 29-15 favorable a los badaloneses.
Este factor junto al control del rebote verdinegro 45 capturas (18 ofensivas), con Miralles y Suton demoledores (27 puntos y 17 rebotes entre ambos), frente a 29 manresanas y el acierto en el último cuarto de Clevin Hannah, en el que sumo 11 de sus 20 puntos doblegó a un rival que sigue luchando por la permanencia y que falló 10 de 21 tiros libres.
Los badaloneses llegaban al choque con le imperativo de una victoria tras sumar siete derrotas, las últimas cuatro consecutivas, en ocho jornadas, frente a un Bruixa d'Or que había logrado tres victorias en las cuatro últimas jornadas, pero que aún está en zona de peligro.
Aunque las dos escuadras luchan por diferentes objetivos, las dos empezaron el encuentro de forma desastrosa con fallos en tiros, pérdidas de balón y, muy especialmente, con pérdida absoluta del rebote ofensivo del Manresa, lo que condicionaría en la primera parte en la que cedería 13 capturas, logrando solo una.
Los de Salva Maldonado se fueron en el marcador (6-0, min. 5) ante la inoperancia ofensiva manresana, aunque Sakic y Rizvic lograban igualar algo la contienda (9-7, min. 7) aunque Savané, merced al rebote ofensivo anotaba desde los tiros libres (15-12). los de Pedro Martínez habían cedido siete rebotes en este primer cuarto.
Tras 0 de 10 en triples por parte local, llegaba el primer acierto por parte de Hannah (18-12, min. 13), aunque los visitantes por medio de Roger Grimau reaccionaban a trompicones (20-18, min. 15), aunque el domino absoluto del rebote permitía a Miralles, junto a un triple de Mallet abrir la primera brecha en el electrónico (27-18, min. 17) tras un parcial de 7-0.
Un nievo tirón visitante, tras un triple del neozelandés Fotú les acercaba otra vez (30-26, min. 18), aunque Clevin Hannah, que había sido padre el día anterior, se cargaba a su equipo a las espaldas y con seis puntos consecutivos daba la máxima ventaja a su equipo al descanso (36-26).
Los manresanos, que empezaron a cerrar mejor su rebote, abrían el tercer cuarto con un triple de Dewar y una canasta de Rizvic (36.31) y se metían de nuevo en el partido aunque un triple del verdinegro Abdalde cortaba la racha visitante, pero con 41-34 (min. 24) surgía la figura de Devin White, que lograría 12 puntos en este cuarto, para empatar el encuentro con un parcial de 0-7 (43-43, 26).
Un tiempo muerto de Salva Maldonado que ordenaba más juego interior y sería el croata Goran Suton, que en los cuatro minutos finales sumaba nueve puntos para llevar a su equipo al último cuarto con cinco puntos de ventaja (53-48).
Dewar recortaba de nuevo diferencias al inicio del último período (53-50), pero ahí empezó el recital de triples del Joventut, tres seguidos y que, junto a las acciones de Savané por dentro obligaban a Pedro Martínez a pedir tiempo muerto con 68-55 (min. 34) en contra tras un parcial de 15-5.
Para empeorar las cosas surgía Hanna con dos triples más que hacían superar la ventaja local de veinte puntos (76-55, m.36) ante un Manresa que no reaccionaba, fallando totalmente en ataque, y encajando una severa derrota.