GRIZZLIES 83 - WIZARDS 92
Beal y Wall someten a Memphis pese al doble-doble de Marc
El mediano de los Gasol fue el mejor (18-11) de unos Grizzlies superados en todo momento por los Wizards. El segundo puesto del Oeste, un poco más lejos. DC, en progresión.
Los Wizards tomaron Memphis (83-92) con todo merecimiento. Fueron mejores desde el salto inicial, sometieron a unos desfondados Grizzlies y consiguieron sumar una de las victorias más importantes de la temporada por el momento en el que llega y por el rival. John Wall (18 puntos y 14 asistencias) fue el encargado de llevar la batuta del encuentro y Bradley Beal de ejecutar. El escolta acabó con 20 tantos y poco a poco va recordando al jugador que deslumbró el curso anterior. Una noticia excelente para los intereses de los capitalinos. Con el backcourt de Washington a pleno rendimiento, los locales no encontraron respuestas para tomar la iniciativa del duelo en ningún momento (en la segunda mitad no lograron acercarsea menos de siete puntos de los locales). Especialmente apáticos estuvieron en ataque: sólo anotaron un triple (1/15) en toda la noche. Con Randolph desaparecido y Mike Conley desacertado (5/15 en tiros), Marc Gasol se recompuso tras una gris primera mitad para acabar firmando su primer doble-doble (18 tantos y 11 rebotes) de las dos últimas semanas.
Aun así, el buen nivel (sobre todo en el tercer cuarto) mostrado por el pívot español resultó insuficiente en un equipo que no estuvo cómodo sobre el parqué. Los nubarrones en forma de dudas vuelven a ceñirse sobre unos Grizzlies que recordaron al equipo que tan malas sensaciones transmitió sucesivamente ante los Cavs, Warriors y Spurs. Hace solo una semana de aquella mala racha y la cercanía de los playoffs (asoman ya a menos de 15 días vista) no hacen otra cosa que cuestionar el momento de forma que atraviesan los de Dave Joerger. Tras lograr superar a los Kings y a los Thunder habían recuperado algo de aliento, pero lo cierto es que el objetivo de acabar en la segunda posición del Oeste se complica. No sólo porque los Rockets aprovechen el impulso de un James Harden lanzado en plena carrera por el MVP, sino porque por detrás los Clippers y Spurs llegan pisando fuerte el acelerador.
Pero parte de la mala imagen de Memphis se debió a la intensidad de unos Wizards que sacaron ventaja de los puntos logrados al contraataque: un 5-26 con el que sometieron a los de Tennessee. Y la excusa del cansancio no puede servir. En esto momento de la temporada todas las franquicias lo están y tanto los magos como los osos venían de disputar en la noche anterior otro compromiso. Puede que Tony Allen (más importante a veces de lo que parece en el esquema de los de Joerger) se perdiese su cuarto partido consecutivo por lesión, pero Randy Wittman tampoco contó con dos de sus titulares: Paul Pierce y Nene. Pese a ello, Washington se las arregló para conseguir un triunfo en Memphis que se le venía resistiendo desde hace más de diez años. Hasta esta madrugada, la última vez que ganaron en la ciudad de Elvis Presley fue el 3 de noviembre de 2004. Ha llovido mucho desde entonces.
"Somos un equipo que agradece el encontrar espacios en el parqué para correr. Creo que esa fuen la clave del partido: mantuvimos el ritmo del partido cuando ellos quisieron ralentizarlo", analizó John Wall (notable campaña la del base) a la perfección. Tras un inicio de curso ilusionante, a mediados de año los capitalinos dieron un bajón que hizo que muchos analistas rebajasen las expectativas (altas) puestas en torno a ellos. Sin embargo, aunque aún sea prematuro decirlo, tras encandenar tres victorias consecutivas parecen haberse reencontrado con su juego justo en el momento idóneo. Predestinados como están a medirse con los Raptors en primer ronda, puede que aún lo hagan con ventaja de campo. Por su parte, los Grizzlies necesitan recuperar el equilibro entre su defensa (que sigue siendo una de las mejores) y su ataque (donde han sufrido mayores porblemas desde el parón por el All Star). Tiempo tienen, pero un descuido puede acabar siendo mortal de cara a los cruces de playoffs. Y el calendario que les queda no es precisamente para coser y cantar. Los Pelicans (se juegan entrar en playoffs), Clippers o Warriors, entre otros, les esperan.