SUNS 98 - MAVERICKS 92
Dallas cae en Phoenix y Carlisle estalla: "Una rotunda vergüenza"
El técnico lamentó la "falta de consistencia" de unos Mavs que marchan 8-8 tras el parón del All Star y ya son séptimos del Oeste. Los Suns, apuran sus opciones de playoffs.
Tras la merecida derrota en Phoenix (98-92) y el triunfo de los Spurs en Atlanta (114-95), los Mavericks han pasado a ocupar el séptimo puesto de la Conferencia Oeste. Uno de los equipos que más y mejor pareció reforzarse durante el pasado verano y a lo largo de esta temporada (llegaron Rajon Rondo, Chandler Parsons y Tyson Chandler regresó desde Nueva York) sigue sin encontrarse sobre el parqué. Es más, tras el parón del All Star su balance no logra superar el 50% de victorias/derrotas (8-8). Un registro impropio de un equipo que aspira al anillo. Pero lo realmente preocupante es que, salvo esta madrugada, en el resto de encuentros a lo largo de este periodo en los que cayeron lo hicieron por un margen igual o superior a los diez puntos.
Ya lo advirtió hace un par de semanas el recién llegado Amar'e Stoudemire y hoy Rick Carlisle ha acabado por explotar tras ver la sangrante falta de competitividad de sus jugadores durante muchos tramos de los partidos. Un buen ejemplo es la primera parte completada por los texanos esta noche en el US Airways Center (57-42). "Fue una rotunda vergüenza", reconoció el técnico. Si ante los medios se dirigió en estos términos, la reprimenda que soltó a sus jugadores en el descanso tuvo que ser monumental. Surtió efecto, ya que los Mavs llegaron a ponerse seis arriba (80-86) a falta de 7 minutos para la conclusión. Sin embargo, los texanos volvieron a desconectarse.
"No jugamos duro todo el tiempo y eso es un problema", analizó. "Nuestra inconsistencia está clara, así que tenemos que mejorar. Debemos ser un equipo más unido, lo que requiere un esfuerzo por parte del vestuario. Toca sacrificarse para revertir la situación", prosiguió el head coach que condujo a Dallas a su único anilllo, en 2011. La pregunta está clara, ¿por qué no pueden los Mavericks jugar los 48 minutos a tope, sin dejar de ser consistentes? "Eso hay que preguntárselo a los jugadores. Tengo mis teorías, pero no las voy a airear en público. Ya les dije a mis hombres lo que tenía que decirle en el descanso. Yo puedo hablar sobre jugadas y tácticas, pero no sobre lo que sucede con el alma del equipo", responde el técnico.
Así que les trasladan la misma cuestión a los jugadores. "No sé la respuesta. Es una respuesta muy profunda", contesta Tyson Chandler. "No lo sé, pero no podemos seguir así. No sé cuántas más veces necesitaremos despertarnos para impedir que vuelva a ocurrir·, dice Chandler Parsons. "Sólo creo que tenemos que hacer más parciales como el que hicimos en la segunda parte. Jugar más duros", prosigue Dirk Nowitzki, el santo y seña de los texanos.
Mientras tanto, tras el triunfo, los Suns siguen apurando unas remotas opciones de clasificarse para los playoffs, pero que hace un par de semanas resultaban una quimera. Eric Bledosoe volvió a ser el más completo (20-9-6) en los de Arizona y Goodwin y Markieff Morris se encargaron de decidir en los minutos finales. Lo cierto es que parecen no echar de menos a Brandon Knight. Desde que el base se lesionó los Suns hana ganado cinco de seis partidos.