GRIZZLIES 85 - THUNDER 74
Los Grizzlies de Marc ahogan a Durant, que se aleja de Playoffs
Oklahoma necesita una remontada importante (está a cuatro triunfos de Phoenix). Durant forzó pero no estuvo fino. Marc Gasol: 15-12-5.
Los Oklahoma City Thunder sufrieron en el FedEx Forum de Memphis su quinta derrota en los últimos diez partidos y siguen aún muy lejos de los Playoffs, en una situación comprometida que requiere medidas de urgencia que eviten una catástrofe de dimensiones históricas. La primera, aunque sin éxito, ha sido forzar a un mermado Kevin Durant para intentar ganar en uno de los pabellones más difíciles de la NBA. La segunda empezará mañana contra Orlando Magic y se trata de coger velocidad de crucero para alcanzar el octavo puesto del Oeste, propiedad de Phoenix Suns. Una distancia de cuatro encuentros que los Thunder deben reducir antes del parón del All-Star: Magic, Pelicans (dos veces), Clippers, Nuggets y Grizzlies como rivales antes del fin de semana del 13 de febrero. Pero como esto no es un videojuego, la situación es realmente complicada. Oklahoma no se encuentra, se observa como un equipo sin ritmo, sin un guión de juego definido más allá de balones a Durant (15 puntos hoy) y Westbrook (14), un equipo que ha perdido una de sus principales señas de identidad: la defensa y el rebote; y sobre todo un conjunto perjudicado por el estado físico de su principal estrella.
Contra Memphis, en un partido con atmósfera de Playoffs, Oklahoma perdió donde se mide el esfuerzo grupal: el rebote ofensivo. 20 para los Grizzlies (10 de Zach Randolph) y 12 para los Thunder. "Fue eso. Consiguieron los rebotes ofensivos, robaron y lograron más posesiones", simplificaba Durant. Y es que en un encuentro donde los dos equipos no mostraron acierto en el tiro (37% Memphis y 34,% Oklahoma), el rebote y la defensa se imponen a la desesperación ofensiva. Y ahí, como siempre, gana el bregador, gana un tipo como Zach Randolph. Peleón, incansable, imparable e inagotable en el esfuerzo en la pintura. Sus 10 rebotes ofensivos (18 en total) reflejan un estilo de vida que, de momento, coloca a los Grizzlies como el segundo mejor equipo de su Conferencia. Z-Bo lleva 12 dobles-dobles en los 12 encuentros que ha disputado desde que volvió de su lesión. 19,3 puntos y 13,8 rebotes, seis veces con +20 puntos y +10 rebotes, 55% en tiros de campo... Esta noche añadió 21 puntos y, una vez más, fue el aliado perfecto para un Marc Gasol que aunque no estuvo fino en los lanzamientos (5 de 14), se mantuvo intenso en defensa, tanto con sus rivales en la pintura como haciendo de 'stopper' en las penetraciones de los exteriores, y generoso en el pase: máximo asistente del equipo con cinco. Al final, doble-doble (15-12).
Los Thunder hicieron la goma durante buena parte del partido, enroscados en un encuentro rudo y farragoso del que en el FedEx Forum pocas veces saldrás ganador. Cuando mejor juega Oklahoma es en transición, corriendo. Así son sus jugadores y así lo agradece su entrenador, que de esa manera evita marcar una nueva ISO en posicional para Durant (siento el palo diario, Scott). Dave Joerger y sus jugadores lo sabían y de ahí el esfuerzo en el rebote.
Memphis rompió el partido entre el final del tercer cuarto y el inicio del último periodo. Casualidad o no, el momento donde los Thunder suelen tirar los encuentros en las últimas semanas. Un parcial de 10-2 para pasar de un 63-60 a 73-62. Canasta de Anthony Morrow y nuevo parcial de 6-0 para cerrar la victoria: 79-64 a seis minutos del final.
Hay un momento curioso, uno más, que explica las dudas de parte de la prensa y la mayoría de la afición de Oklahoma con Scott Brooks. A diez minutos del final, OKC pierde por 11 con Durant y Westbrook en el banquillo. Brooks pide un tiempo muerto. La gente da por hecho que volverán a entrar sus dos estrellas, pero no. En un giro inesperado de los acontecimientos (inserte tono dramático aquí), un técnico que se está jugando entrar o no en los Playoffs cuando en su plantilla tiene a dos de los cinco (o diez, según su nivel de cariño hacia Westbrook) mejores jugadores de la liga, decide no utilizarlos. Un minuto y medio después, dando la sensación de que se le había olvidado que el actual MVP estaba a su lado en el banquillo, Durant entra. Westbrook, que debía de estar escondido detrás de Ibaka (si es así te entendemos, Scott), tendría que esperar otro minuto y medio más. Russell entra a 8' del final (75-64 para Memphis) e Ibaka a 7' (77-64), en sustitución de Perkins.
No quiero que se entienda esto como una cruzada Anti-Brooks, sino como una crítica hacia un entrenador que un día más, y a pesar del mal día de sus estrellas, volvió a demostrar poca capacidad de reacción ante situaciones concretas que plantean los partidos. "Durant y Westbrook siguen en el banquillo después de un tiempo muerto. Interesante estrategia", escribía en su Twitter Darnell Mayberry, periodista de The Oklahoman.
Los Thunder llevan ya 24 derrotas esta temporada, más que en cualquier de las tres campañas anteriores completas (23 en la 2013-2014, 22 en la 2012-13 y 19 en la 2011-12), y necesitan, aproximadamente, no perder más de ocho partidos hasta que termine la liga regular. Los estadistas marcan el octavo puesto en 50 victorias. ¿Lo conseguirán?. En caso de no hacerlo, Kevin Durant sería el primer MVP de la NBA en quedar fuera de Playoffs el año después de haber recibido el galardón.