BULLS 106 - NUGGETS 101
Los Bulls ganan con un Pau Gasol de récord: ¡9 tapones!
El español logró la mejor marca de su carrera en esta faceta y rozó el triple-doble: 17-9-9. Con un gran Jimmy Butler, Chicago estrenó el 2015 superando a unos correosos Nuggets.
Los Bulls estrenaron el nuevo año con victoria (106-101) ante unos Nuggets que nunca dieron su brazo a torcer durante su visita al United Center. Los de Thibodeau cosecharon su undécimo triunfo en los 13 últimos partidos gracias a otra actuación estelar de Jimmy Butler (26-8-8), a un Derrick Rose que despertó a tiempo (anotó sus 17 puntos en la segunda mitad) y a un Pau Gasol que rozó el triple-doble con otros 17 tantos, nueve rebotes y ¡nueve tapones! La mejor cifra de su carrera en este apartado estadístico. Una marca estratosférica que permitió a Chicago catapultarse hasta los 18 gorros, récord histórico de la franquicia.
El partido pilló a los locales aún bajo la resaca por la llegada del 2015, situación que Denver supo aprovechar para escaparse en el marcador. Pau salvo los muebles en el primer cuarto con su intensidad bajo tableros: capturó cuatro rebotes ofensivos y anotó siete puntos para mantener a los de Illinois a flote (22-23). Sin embargo, de la mano de unos acertados Wilson Chandler y Ty Lawson (28 puntos antre ambos al descanso), los de Colorado se fueron dominando al intermedio con claridad (42-53).
A buen seguro que Thibodeau puso las pilas a sus hombres en el vestuario, puesto que cuando saltaron de nuevo al parqué parecieron otros. Con un inspirado Butler (consiguió 15 de sus 26 tantos en el tecer periodo), los Bulls redujeron a añicos la ventaja del equipo de Brian Shaw y un triple del reaparecido Hinrich (se había perdido por lesión los cinco partidos anteriores) ponía a los locales por encima (77-74) antes de la batalla final. Mientras, en defensa Gasol se había encargado de echar el cerrojo colocando cinco de sus nueve tapones de la noche (durante su etapa en los Grizzlies llegó en dos ocasiones a los ocho). Todo un muro. El único pero en todo el tercer cuarto fue la torcedura que sufrió Mike Dunleavy en el tobillo derecho. Habrá que estar atentos a lo que dictaminen las pruebas médicas, el alero no se ha perdido ni un solo partido como 'bull'.
Llegado el momento de la verdad, Rose demostró quién es el verdadero líder en Chicago. "Mi mentalidad no va a cambiar. Soy un base tirador", explicó tras el encuentro al ser preguntado si ante su mala racha en el lanzamiento (7/25 esta madrugada) debería pasar más el balón a sus compañeros (qacabó con ocho asistencias). El MVP de 2011 recuperó sensaciones a tiempo para con sus 13 puntos y un tiro exterior a 24 segundos para la conlusión liquidar la contienda. Un partido en el que los Nuggets se mantuvieron siempre con vida gracias al trabajo de Afflalo (y a los ya mencionados Lawson y Chandler) y a un renacido Kenneth Faried. 'Manimal' parece haber recuperado su mejor versión, aquella con la que sorprendió a los que apenas le conocían en el pasado Mundial de España, y se fue hasta los 18 puntos y 19 rebotes.
Unos números que algunos aprovecharan para criticar a Pau blandiendo la etiqueta de soft (blando). Pues en esta ocasión, habría que recalcar que no fue el catalan quien se emparejó con el ala-pívot, sino Joakim Noah. En esta ocasión, el francés y Taj Gibson fueron los interiores elegidos por Thib para los minutos calientes. Una circunstancia que puede que privara a Gasol de lograr el octavo triple-doble de su carrera. Pero, lo que más le dolió no fue no conseguirlo, sino ver el desenlace desde el banquillo. "Siempre quiero estar en el partido, sobre todo en el último cuarto cuando todo está por decidirse. Me gusta jugar, me gusta competir", reconoció. Es lo que tiene formar parte de un equipo con un técnico exigente, que no da lugar a concesiones y que maneja una plantilla de gran talento y variopintas opciones. Que se le pregunten sino a Mirotic. Niko apenas jugó 11 minutos, en los que aportó tres tantos, un robo y una asistencia. Su entrenador está satisfecho con su rendimiento como ala-pívot, pero como alero aún le ve cosas por mejorar. Mientras tanto, los Bulls siguen engrasando la maquinaria. Preparándose para la puesta a punto. Lo de verdad aún está por llegar.