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PACERS 90 - BULLS 92

Butler marca el ritmo de los Bulls de un buen Pau Gasol

El escolta celebró su título de jugador de la semana con un genial encuentro (27 puntos). El español anotó 20 en un partido que Chicago se complicó solo.

Pau Gasol ante la defensa de Lavoy Allen.
Pau Gasol ante la defensa de Lavoy Allen.USA Today Sports
NBA

Ya van siete y no miran atrás. Los Chicago Bulls vencieron de nuevo esta madrugada y su racha parece no tener fin. "En los últimos 10 partidos nos estamos moviendo en la dirección correcta. Creo que estamos jugando fuerte en ambos lados de la cancha y recibiendo la contribución de un gran número de jugadores diferentes. Eso ha sido bueno, pero tenemos que ser capaces de mantenerlo y seguir construyendo", manifestó Tom Thibodeau, el técnico bull, que no puede esconder su felicidad, a pesar de esa mirada desafiante y de pocos amigos que le acompaña siempre. Es feliz por la sencilla razón de que las cosas van funcionando como a él le gustan. Bueno, la defensa no es la roca de la temporada pasada, pero el ataque es como la liberación del kraken en comparación a lo que nos han ofrecido sus diferentes Bulls desde que se sienta en su banquillo. Una cosa por la otra. Y parece que el cambio les está yendo muy bien como se demostró esta madrugada en la victoria ante los Indiana Pacers (90-92) con un genial, nuevamente, Jimmy Butler. Es su enésimo gran partido esta temporada y parece que ya no hay techo para él.

El escolta fue crucial y celebró su primer premio de Jugador de la Semana (consiguió además el del mes de noviembre) con 27 puntos (decimonovena vez esta campaña que hace 20 o más puntos) y 9 rebotes en los 44 minutos que Thibs le exprimió en el partido. Una máquina incansable este Butler. Su aportación está siendo una bendición cuando los Bulls encallan en algunos momentos de los partidos como el de esta última madrugada frente a unos desahuciados, pero combativos, Pacers. Los de Indiana están haciendo más de lo esperado teniendo en cuenta las armas que tienen. La lesión de Paul George y la marcha de Lance Stephenson sin conseguir un recambio de nivel, les hacían, a principio de curso, candidatos a ser el peor equipo de la NBA junto a los Sixers. Pero ya llevan 11 victorias y pueden llevar la cabeza alta.

El pundonor de los Frank Vogel les hizo creer cuando nadie más creía en ellos, la verdad. Porque cuando restaban 2:33 para acabar el tercer cuarto ya perdía 54-75 después de un triple de Dunleavy (8 puntos) y al empezar el último periodo, la situación no era mucho mejor: 65-81. Pero en seis minutos todo se dio la vuelta. Chicago no remataba. Dormido en su complacencia sólo anotó 2 tantos en ese lapso, mientras que su rival 19. Vuelta al marcador. Partido nuevo. Los golpes, entonces, comenzaron a volar por el Banker Life Fieldhouse y entre Butler y Pau Gasol resolvieron la pesadilla de Illinois. Rose, a pesar de sus 20 puntos, estuvo desacertado con un 5/20 en tiros de campo. Mirotic, por su parte, fue autor de cinco tantos en diez minutos.

El ala-pívot español, con otro buen partido de 20 puntos y 6 rebotes, un +15 con él en cancha (la máxima de su equipo), metió dos puntos claves (86-85), y casi imposibles de hacer, cuando Indiana, de la mano de un genial Copeland, se había ido a tres. El alero de los Pacers comenzó el cuarto cuarto con 4 tantos y acabó con 17. La mano de una remontada que un triple de Butler, tras asistencia del español, ponía fin: 90-92. Definitivo. Pero pudo no ser así.

Porque aún hubo tiempo para la tensión y el miedo en los Bulls. Cuando el partido moría, en la última jugada del encuentro, la defensa de Chicago se comió la pizarra de Vogel en un saque de banda. Noah falló en su marca sobre C.J. Watson. Le siguió, pero le dejó marchar, en un despiste para un emparejamiento innecesario con Miles, cubierto ya por Rose. Watson, ex de los Bulls, nunca se ha encontrado tan solo en una cancha de baloncesto. En la esquina izquierda de la cancha, desde el perímetro, lanzó un tiro que no entró. Los brazos de Gasol diciendo "no", fueron una premonición. Final del partido. Felicidad para Butler. Felicidad para los Bulls que rompen una racha de cuatro derrotas seguidas en Indiana.