Un derbi con los papeles cambiados en el Buesa

Bien es cierto que los rivales del Baskonia han sido de postín, pero la grada se impacienta y ha despoblando el Buesa Arena. Lo normal es que el club acabe por colocar lonas en parte alta.

En el caso de los Hombres de Negro, se vieron en verano expulsados, luego se formó un equipo deprisa y corriendo y finalmente han cuajado el mejor inicio de su historia. Mumbrú tenía el viernes un 99% de posibilidades de causar baja, según su técnico, por la rotura parcial en la planta del pie. Ojo: su 1% es mucho, y más en un derbi.

También será un día especial para Sito Alonso, que dijo nones a Querejeta y éste reaccionó con una dura nota negando las conversaciones y apuntando que no entrenaría al Baskonia. En el bando vitoriano, Orlando Johnson se la juega. Desde hace una semana se le está buscando sustituto. Perkins tampoco satisface a los dirigentes del Buesa, pero dio un buen nivel ante Olympiacos y puede tener alguna bala más en la recámara. Baskonia aterrizó ayer procedente de Atenas y sudó por la tarde.

El exBilbao Hamilton, recuperado de la rotura de fibras y metido en mil follones con la entidad tras aducir ésta sobrepeso, ha sido dado de alta en detrimento de DJ White. Tampoco jugará Gomes. Los dos tienen un negro futuro en el club. Los vitorianos, muy débiles bajo el aro, son el conjunto que menos rebotes atrapa por partido: 25,3.